Tragar veneno: la oda al fútbol de Esteban Catalán

Llega el fútbol en formato letras gracias a "Tragar veneno", nuevo libro de Esteban Catalán sobre el deporte rey

Escrito por Chile en viñetas

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«Acepten la injusticia, traguen veneno, que todo se equilibra al final«. Estas son las palabras que Marcelo Bielsa le dijo a los jugadores del Olympique de Marsella luego de perder contra el poderoso y millonario Paris Saint Germain. Este discurso se ha transformado en un mantra para todo fanático del fútbol ante cualquier adversidad que atraviese en su vida, como una luz de esperanza de que después de la tormenta sale el sol, que todo se devuelve y tarde o temprano, se logrará salir adelante.

Pasión de multitudes, deporte rey, el deporte más lindo del mundo o, si prefieren, veintidós tipos corriendo atrás de una pelota. Se ame o se odie, es difícil permanecer indiferente ante lo que provoca el fútbol en el mundo y en particular en América latina. Esto ha provocado que, además de llenar estadios y tener audiencias de miles de millones de personas para una final de un mundial, haya un amplio catálogo literario al rededor. Un ejemplo de esto es «Tragar veneno. Sobre las alegrías, derrotas y otras extrañezas del fútbol», de Esteban Catalán.

Catalán es periodista de la Universidad de Santiago, magíster en Escritura Creativa de la Universidad de Nueva York y doctorando en literatura por la Universidad de Warwick. Ha escrito en la revista chilena Qué pasa y en la española Panenka, una de las mejores revistas sobre fútbol de la actualidad. Además, ha publicado cuentos y una novela.

Con su libro «Tragar veneno», se suma a una vasta literatura en torno al fútbol, en este caso a modo de ensayo . En Comiqueros hay algunos ejemplos de fútbol literario, como el cómic Silencio en el estadio, la biografía de Elías Figueroa, el manga Blue lock, la novela El hombre del maletín, y la historia e Caszely, Paredes y Barticiotto en Colo-Colo.

Después de la tormenta sale el sol, aunque la tormenta dure 100 años

El libro se divide en dos partes, donde la primera tiene que ver con sucesos futbolísticos tanto mundiales como nacionales, mientras que la segunda se enfoca en viajes e historias que ha hecho Esteban Catalán en su rol de periodista.

Los primeros capítulos se centran en la obtención de la Copa América de 2015 y la Copa América Centenario 2016, después de 100 años de derrotas y sufrimiento. Se centra en los constantes fracasos y «casi casi» que vivió la Selección chilena en el proceso, con finales de Copa América perdidas; la manera en que los países de la región obtenía sus primeros trofeos mientras que Chile, que siempre ha intentado situarse en un tercer lugar tras Brasil y Argentina, muchas veces pasando por alto los méritos de Uruguay, no lo conseguía; los sudamericanos perdidos en el último partido, entre otras desgracias del acontecer futbolístico nacional.

Luego se da espacio para la «generación dorada», esa que empezó un camino de esplendor de la mano del recién fallecido José Sulantay, para pasar por las manos de Marcelo Bielsa y en conjunto a una generación que por fin se creía capaz de grandes cosas, lograron triunfos que nos fueron esquivos por todo un siglo. Un lugar especial tiene el penal de Alexis Sánchez con que Chile se coronó campeón en 2015 en el Estadio Nacional, en parte opacado por algunas cosas que han salido a la luz en medios como Informe especial, pero no por eso deja de emocionar su recuerdo.

Tras este repaso, se pasa al fin del sueño, con una selección que no logró clasificar a los mundiales de Rusia ni Qatar, a pesar de contar con los mismos jugadores que fueron bicampeones y que perdieron una final de Copa Confederaciones. Tras esto, se da lugar al Mundial de Qatar, con una Argentina protagonista y un Lionel Messi que obtuvo el título que lo consagraría como uno de los mejores de la historia, ya sin discusión.

De fútbol internacional también se vive

Tras el repaso de la primera parte, la segunda va a recorrer el mundo para irse a República Checa, considerando que Catalán no podía viajar a Checoslovaquia, para repasar una entrevista que le realizó a Antonín Panenka, el futbolista que se hizo famoso por patentar los penales como lo pateara Alexis Sánchez y que le dio origen al nombre de la revista española ya mencionada. En esta historia no se centra en el penal, sino que en el modo de ver el fútbol del ex jugador y la simpleza con la que vive en su país.

También le da tiempo a Islandia, esa selección que revolucionó el fútbol en la Eurocopa de 2016, llegando a cuartos de final tras vencer a Inglaterra (en el único error que le encontré al libro, ya que dicen que ese triunfo fue en cuartos, no en octavos) y quedar eliminado por Francia. Cuenta el encuentro que tuvo con el director técnico del equipo de manera totalmente casual y parte de la conversación que tuvieron.

En otro capítulo se habla de Pelé y la discusión sobre el mejor futbolista de la historia, con Diego Maradon y Lionel Messi disputando el título, dejando por detrás a otros futbolistas como Cristiano Ronaldo, Cruyff, Ronaldo el fenómeno , entre otros.

Conclusiones finales

«Tragar veneno» es un libro entretenido y que trae a la memoria múltiples recuerdos, además de aportar nuevas miradas a los fanáticos del fútbol. El subtítulo del libro ya lo anticipa, pero cabe aclarar que es un libro pensado para futboleros y que quienes no amen este deporte no lo disfrutarán tanto como quienes sí.

Curiosamente, se deja un tanto de lado la pasión con la que se vive el fútbol, con críticas al fútbol chileno y al nivel de la liga local, llegando al nivel de insinuar el dejar de verlo y preferir ligas europeas o la Champions League. Para un fanático del fútbol y de Colo-Colo como quien escribe, esto me hizo un poco de ruido, probablemente por esa costumbre que tenemos los hinchas de dejar de lado la objetividad y creer que por mucho que exista el Real Madrid, Barcelona, Manchester City o Liverpool, seguirá prefiriendo el blanco y el negro (copa Sudamericana aparte).

El libro se lee rápido, tiene capítulos de una extensión media, un tanto desconectados unos de otros, lo que permite tomarlo y dejarlo cuando uno estime conveniente para pasar un buen rato (a pesar de esto, yo lo leí en dos días). La escritura es simple, no elitiza el fútbol y es un regalo ideal para ese amigo o familiar que disfruta cada fin de semana, para complementar los enojos que le da su equipo de cabecera y recordar un pasado que fue mejor, al menos en lo que la selección chilena se refiere.

El libro es de Tusquets del Grupo Planeta, por lo que es fácil de encontrar en cualquier librería del país, a un precio sugerido de $16900.