Llegamos a diciembre. Otro año está alcanzando su final y, como siempre, todo se reviste de rojo y las decoraciones navideñas se toman la ciudad. Vuelve Mariah Carey con su invasivo tema All I Want for Christmas Is You y los Viejos Pascueros o Santa Claus con disfraces baratos aparecen en cada esquina.
La Navidad se apodera de todo
La temática navideña no se reduce exclusivamente al comercio, puesto que miles de manifestaciones culturales y artísticas (como las incansables maratones de cine navideño que pasan por ciertos canales del cable) se inspiran en esta fecha para desarrollar su oficio y nos regalan grandes obras que pasan a la posteridad y se transforman en emblemas de la celebración.
En este caso, la legendaria escritora y reina de la novela negra, Agatha Christie se sumó al espíritu de las festividades y situó la historia de una novela en plena víspera de Navidad, transformando una celebración alegre en una investigación criminal y una situación oscura. O en una tragedia, como bien dice el título de la novela.
Agatha Christie.
Hércules Poirot
No se puede hablar de Agatha Christie sin mencionar su afamado personaje, protagonista de decenas de sus libros y que ha obtenido una renombre igual o mayor que la de su creadora, el detective belga Hércules Poirot.
El genio del trabajo detectivesco, el maestro de la sospecha, la unión lógica de hechos y las pesquisas de pruebas está de vuelta. Es tanta su fama que hasta tiene su propia estatua en Ellezelles, Bélgica, país del cual se ha convertido en personaje insigne.
Estatua de Poirot en Bélgica.
En la novela escrita en 1938 Navidades Trágicas o Hercule Poirot’s Christmas en su idioma original, será él mismísimo Poirot el encargado de asistir a los otros policías en buscar al culpable y desvelar las enigmáticas circunstancias que rodean al crimen de turno. Como era de esperar, es su excelsa labor de detective la que logra mayores avances y la que al final se toma el protagonismo en la investigación
Algo parecido ocurre en esta historia.
Argumento del libro
Un detestable anciano, millonario y jefe de hogar llamado Simeon Lee, invita a pasar las navidades a todos sus hijos con sus respectivas esposas. Aunque el hombre mayor es un ser despreciable, cruel y abiertamente hostil, ninguno de sus hijos se ausenta a la reunión, ni siquiera aquellos que lleva años sin ver y con quienes ha tenido incontables peleas. Una vez que se encuentran todos en casa, los trata con desdén y les regala todas las opiniones negativas que tiene sobre ellos mientras se ríe en sus caras.
Diferentes representaciones de Poirot.
Tú eres un cobarde, un avaro, un perdedor, un aprovechador, una vergüenza, etc. y otros comentarios de esa índole son los proferidos por el anciano hacia sus “seres queridos”. En medio de ese tenso ambiente ocurre un asesinato que pilla a todos por sorpresa. La policía recibe el llamado e inician una extensa investigación para esclarecer el asunto.
El reconocido (reconocido en el mundo en que se desarrolla la historia) inspector Hércules Poirot llega a ayudar con la investigación para darle una mano al inspector Sudgen y el coronel Johnson, los otros policías locales. Poirot, valiéndose de su conocido ingenio e intuitiva habilidad para desenmarañar misterios, se dedica a revolver a la convulsionada familia Lee con preguntas e indagaciones hasta sacar a la luz sus secretos más oscuros.
Todos son sospechosos, todos tienen motivos, pero solo uno es el culpable.
Del libro a la pantalla
Imagen de la serie de 2006.
No podemos dejar de mencionar que la historia de Navidades Trágicas tiene un par de adaptaciones a la pantalla chica. En 1994 fue la película (directa para la televisión) llamada Agatha Christie: Poirot – Navidades Trágicas Y en 2006 se adaptó como parte de la serie francesa-belga-suiza llamada Pequeños Asesinatos en Familia.
Navidad, ¿celebración familiar?
La Navidad suele ser un momento de compartir con la familia, una excusa para juntarnos con nuestros seres queridos que no vemos con mucha frecuencia y pasar un rato agradable ingiriendo alimentos y tomando alcohol hasta reventar. Aunque eso es lo que la mayoría deseamos o esperamos vivir ese día, la realidad es que rara vez las fiestas son así de idílicas. No todos los familiares son de nuestro agrado, tienes que aguantar los chistes o comentarios desagradables de tíos, abuelos o quien sea. Tampoco faltan las discusiones sobre política, sobre cómo cierto miembro está llevando su vida, sobre la comida, los invitados y, como lo dice en el mismo libro el inspector Poirot, beber y comer en exceso lleva a las familias, en muchos casos, a terminar peleando y deseando estar en cualquier otro lugar.
¿Cuántas cenas navideñas han acabado en desastre y con familias rotas?
Toxicidad familiar
La novela, si la leemos y analizamos con los paradigmas actuales, la podemos interpretar como una crítica o representación de la familia y las actitudes tóxicas de sus integrantes. Antiguamente era común que el hombre de mayor edad, el dueño de casa y patriarca del núcleo familiar, fuera una especie de rey en su propio hogar. Mandaba a todos, especialmente a las mujeres, y su palabra era ley y todos los hijos (nueras y yernos incluidos) debían obedecerlo ciegamente.
Además del evidente machismo que imperaba en dichos grupos familiares, también teníamos la ácida crítica o reproche que se lanzan entre ellos. Comentarios con más malicia y envidia de lo que podría hacerlo un enemigo. El jefe de hogar criticando al resto, sus hijos insultándose, los tíos y primos comentando cosas negativas sobre los otros, etc.
En los últimos años se ha tomado conciencia sobre ese tipo de situaciones y son muchos quienes han cortado lazos con familiares en pos de cuidar su propia salud mental.
¿Es, como pasa en la novela, la odiosidad familiar, el acoso y los insultos entre parientes motivo suficiente para cometer asesinato? O son acaso los secretos familiares tan impactantes que es necesario acriminarse para evitar su divulgación?
Navidades Trágicas como puerta de entrada a Agatha Christie
Es una lectura rápida y fácil de iniciar. A las pocas páginas te involucras en la historia y momentos después empiezas a buscar sospechosos. Lo interesante es que todos los personajes se muestran como sospechosos, cada uno de ellos tiene una razón para haber cometido el crimen y terminas desconfiando de todos, a medida que se desvelan sus secretos. Cada nuevo antecedente que se presenta, es otro condimento para tus propias hipótesis e intentos por descubrir al asesino.
Funciona de maravilla como punto de entrada a la literatura de Christie. No es necesario haber leído nada de ella antes y, como es una novela fácil y digerible, no se te hará en ningún momento pesada o difícil de avanzar.
En ella se observan sus grandes dotes para el misterio que tanto la caracterizan. Si lo que lees aquí te agrada, significa que sus otros libros también serán de tu gusto y no debes esperar más para hacerte con ellos.
Algunos de los mejores libros de Agatha Christie.
Y si ya eres un fan de ella y estás familiarizado con su escritura, no puedes dejar de leer Navidades Trágicas y sorprenderte de su capacidad inventiva y un misterio que nuevamente te toma por sorpresa.
Opinión personal
No cabe duda de que Agatha Christie es sinónimo de calidad y sus novelas representan enigmas y entretención garantizados. Navidades Trágicas no es la excepción y por ende se presenta como una lectura perfecta para esos días de celebración. Su extensión es tan corta que no te tomará más que un par de horas en acabarla, e incluso puedes aprovechar para leer en esos tiempos muertos mientras se cocina la cena, mientras esperas a tus familiares o durante ese aburrido monólogo de tu tía que relata sus vacaciones para presumir.
Lo único que le puedo criticar es el final.
->>>>>>SPOILER<<<<<<-
La explicación de cómo sucedieron realmente los hechos me pareció algo rebuscada y poco creíble. No es algo que uno imaginaría posible y no me ha dejado convencido.
Lo peor es el asesino. Quien resulta ser un personaje secundario, al que conocemos poco o nada (mucho menos que a los otros personajes, en especial a los hijos) y que aparece en escena contadas veces. Si bien es cierto que ello dificulta el adivinar la identidad del culpable, me ha sabido un poco mal que pasemos tanto tiempo del libro adentrándonos en los secretos y el mundo interior de los personajes principales para después descubrir que no era ninguno de ellos y que todo ese tiempo fue desperdiciado. Siento que la autora saca del sombrero casi un Deus ex machina y que hizo trampa para que los lectores no adivinen quién cometió el homicidio.
->>>>>>FIN DEL SPOILER<<<<<<-
Pero sus fallos no empañan la gran obra que es Navidades Trágicas. En verdad me ha encantado el libro y es todo (o casi todo) lo que esperaba de una historia de Christie.
No esperes más y aprovecha estas fechas como excusa perfecta para zambullirte en una genial lectura.
Y si eres de esos Grinch que odian la Navidad y detesta todo lo relacionado a su celebración… pues mejor aún ya que te sentirás a gusto en una historia en que la Navidad es un calvario y su desenlace es fatal.