Llegaba el año 1995 y con ello el fin de una era. Dragon Ball Z finalizaba en TV y manga, dejando una marca en el mundo del anime de todo el globo. Pero TOEI quería más, la producción televisiva de la serie dejaba cifras alentadoras y los fans siempre consumían más.
Es así como nació Dragon Ball GT que, si bien no tuvo la audiencia que tuvo Z en sus mejores tiempos, dio un final alternativo (no canon) a la saga, historia que, hasta el día de hoy, a todos los fanáticos les saca una lágrima.
Pero hay mucho fanático ortodoxo que odia GT, no les gusta por su animación ni por su historia, o simplemente porque no es canon, y lo crucifican tal como algunos lo hacen contra el FullMetal Alchemist del 2003. Acá, defenderé a GT, me lo banco a morir y explicaré la respuesta a esta pregunta: ¿Qué hace a GT una gran serie que merece ser reconocida?
Sinopsis e historia
Ubicado 20 años después de que Gokú derrotara a Boo y 10 años después de que terminara Dragon Ball Z, en el 28° Torneo de las Artes Marciales con la pelea de Uub (o Oob) y Gokú. Nos muestran a un Gokú de traje celeste, significado de ser ya un sensei, entrenando a Uub en el templo de Kamisama (Dende).
Todo transcurre con calma en la Tierra, pero es mientras terminaban de entrenar cuando Pilaf re-aparece e invoca a un Shen Long rojo, ya corrompido por el exceso de uso de las esferas. Deseando que Gokú se vuelva pequeño nuevamente, las esferas cumplen y se retiran por el universo, invitando a los guerreros Z a ir en su búsqueda y recuperarlas en menos de un año, antes de que la Tierra explote.
Pan (originalmente Goten), Trunks y Gokú rejuvenecido, se embarcan hacia el espacio exterior, dando comienzo al Gran Tour o Tour Galáctico (GT). En esta búsqueda recorrerán muchos planetas y se encontrarán con su primer gran adversario, Baby, quien da el comienzo a la linealidad de enemigos de la saga y el mal que ahora aflige a las esferas del Dragón.
Aparecerán constantemente nuevos villanos y traerán a antiguos conocidos, un par de cameos de Cell y Freezer, un Súper Androide 17 y también la saga de los dragones oscuros, harán de GT una aventura memorable.
¿Qué hace de GT una buena serie?
Hay que tener en consideración que la historia de GT está producida por TOEI Animation y no cuenta con la dirección de Akira Toriyama, sino que se encuentra bajo las manos de Osamu Kasai. Independiente de esto, Toriyama si colaboró en algunos aspectos de la serie, como la creación de ciertos personajes, el arte conceptual de la serie, diseños, algunos aspectos de guión e incluso en el logo de esta.
Primer argumento: DGBT plantea una linealidad no tan alternativa como se puede pensar y eso se ha respetado hasta ahora. La historia de Dragon Ball Súper ocurre entre el final de la saga de Boo y la aparición de Uub; GT, en cambio, comienza 10 años después de esta aparición, situándola en un espacio tiempo viable para convertirla en canon.
La sucesión de hechos dentro de GT está bien estructurada: comienza desde un punto que se cuelga de lo último que vimos en Z, para posteriormente darnos el argumento de que algo no anda bien con las esferas del dragón, bajo esta premisa y posterior a la aventura en el espacio.
En la batalla con Baby, se desata una caos energético en la Tierra, producido por las mismas esferas, que une los mundos, permitiendo la fusión del Súper Androide 17 (plan ideado por el Dr.Gero y el Dr.Myu). Existe una constante de las esferas, avisándonos por detrás de los hechos, que la saga gira en torno a ellas. Posterior a la trama de 17, se recurrirá a las esferas una vez más, para… ¿adivinen qué? REVIVIR A KRILIN.
Pero las esferas no funcionarán y se dispersarán por la región, trayendo consigo el surgimiento de 7 Dragones Oscuros, creados a partir del mal y excesivo uso del poder de las esferas. Para concluir en una batalla épica llena de fan service.
Además, un plus extra de este argumento es que el final de GT tiene una carga emocional enorme, donde se plantea, además, la elevación de Gokú a otro plano, junto con momentos nostálgicos, el constante entendimiento de los personajes sabios y una Pan mayor viendo a su abuelo perderse entre la gente.
Segundo argumento: DBGT tiene el foco de su desarrollo de personajes bien dirigido, no gasta en extras. Gokú y Pan son los protagonistas de esta saga, y si bien a la hora de los quiubos Pan no colabora mucho que digamos, es la premisa emocional de la serie la que busca conectar con la empatía del espectador, además de los power up de Gokú, claro está.
Los villanos de GT son atractivos, al menos los principales. Sin contar a los dragones, que tienen una explicación pero no una historia, el resto de los villanos son presentados como corresponde, con una fuerza avasalladora, un pasado que los motiva y una buena dosis de crueldad.
Cabe recalcar que en el arco del viaje por el espacio, nos topamos con una constante crítica social representada por el abuso de los impuestos, injusticias sociales, manipulación a través del credo y abuso de la población, dándole un punto extra a la serie.
Asimismo, hay que recalcar que se perdieron personajes que uno reconoce como poderosos, como Gohan, Picoro, Trunk o el mismo Goten. Así como hay otros personajes que derechamente desaparecieron. Aún así, también se comprende por lo dicho anteriormente: el protagonismo de la serie se lo lleva solo Gokú, Pan y los villanos, el resto, son meras colaboraciones.
Como punto extra, lo bacán de GT es que se agregan personajes de películas del universo Z como cameos, debido quizá a la perdida de orientación temporal de estas o simplemente por dedicación a la saga.
Tercer argumento: los power-up de la serie son geniales. No pierden la belleza de Z de que es necesario recurrir a ciertas acciones o tener cierto sentir al momento de poder elevarse, manteniendo lo clásico de la serie original. El recurso del uso de Ozarus, la fusión y que los villanos absorban a otros para poder hacerse más fuertes, se agradece.
Dentro de este argumento, tenemos sí o sí al SS4, que es la transformación más recurrente de Gokú. Desde que lo consigue en su combate contra Baby después de haber sido un Ozaru, no deja de utilizarlo sin dudar frente a los villanos de la serie o en la circunstancia que lo amerite. Se muestra un Gokú menos duditativo, más serio, como el Gokú de la Saga de Boo y no como el Gokú de Súper.
Ultimas apreciaciones
Dragón Ball GT es una oda a la nostalgia y una enorme muestra de respeto y cariño a la saga clásica de Dragon Ball. Esto se puede apreciar no solo en la inclusión de Toriyama y su constante palabra al momento de ir desarrollando la serie, sino que lo encontramos en sus paletas de colores, en la dedicación de la producción, también lo podemos ver en los diseños de personajes, en el fan service, en su banda sonora y por supuesto en:
http://www.youtube.com/watch?v=dIN4nlqhpWY
Toriyama jamás ha descartado la posibilidad de que pueda, de alguna manera, unirse GT a la franquicia original. En varias declaraciones siempre ha afirmado que GT es una buena side-story y que él la disfruto como uno más de nosotros. Esto lo podemos encontrar en una nota de puño y letra del autor en las Dragon Box.
«… Al ser flojo por naturaleza, fui absurdamente feliz cuando por fin logré terminar la serialización de Dragon Ball, y finalmente salió del ‘Deadline Hell’. La gente del anime de TV quería continuar un poco más, pero yo (no podía hacer) más que eso… Y así, dejé al anime Dragon Ball completamente a cargo del equipo de anime, historia y todo. Eso fue Dragon Ball GT (…) Dragon Ball GT es una gran historia alterna del Dragon Ball original, y me hará feliz que lo veamos y disfrutemos juntos.» (Traducción por la web Gamedots)Otros aspectos a destacar: siento que a Milk fue a la única mujer que dejaron envejecer en todo aspecto; es algo más menos injusto, pero sí me gusta que Pan se parezca mucho a la Milk de Dragon Ball. También, siento que Pan podría haberse aprovechado mucho más. Ahí puede notarse la falta de mano de Toriyama, quien en Súper si incluyó mujeres que se pudiesen convertir en SS.
Otros de los factores es la carencia de lógica de algunas escenas, donde siempre te preguntas: ¿pero por qué mejor no vuelan?, o ¡solo pégale y ya! Pero siento que estos están compensados en el excelente doblaje perrón de algunas escenas y, junto con esto, en la seriedad de sus momentos épicos. De igual forma, su lento inicio que se compensa con la intensidad de las siguientes sagas.
Sin duda, Dragon Ball GT es una serie que, a través de sus 64 episodios, logra entregar entretención, buenas peleas, sentimientos encontrados y emociones que nos hacen recordar porqué amamos tanto a esta franquicia.