Últimamente, Riot Games ha estado incursionando en proyectos nuevos, desde IP’s nuevas, como Valorant, a juegos spin-off de League of Legends, como Legends of Runaterra. Ahora, también se ha metido en el rol de mesa con Dark Tides of Bilgewater, el que parece ser el inicio de una serie de pequeños suplementos para Dungeons and Dragons 5ta edición ambientados en el mundo de su juego más famoso.
Lo primero que notamos es que el arte del pequeño suplemento resulta bastante familiar, la mayoría ha sido sacado del juego para celular o de la página oficial. Este reciclaje no resulta molesto si tomamos en cuenta que es un suplemento gratis, pero le quita mucha uniformidad visual.
Yendo al contenido, este empieza con una introducción bastante completa a lo que vendría siendo Aguasturbias, por lo que no resulta necesario recurrir a información adicional como la página web, cinemáticas o el libro dedicado a esta región para ambientar la partida.
Sin embargo, más temprano que tarde se empiezan a notar algunos problemas de diseño.
Detalles que hay que pulir
Las dificultades comienzan cuando llegamos a las razas, pues carecen de estadísticas propias. Sería perdonable si entregaran algunas herramientas para adaptar lo que vemos en el Manual del Jugador a la ambientación de Runaterra, pero más allá de un comentario estilo “bueno, los dracónidos pueden servirte como híbridos humano-dragón” en referencia a Shyvana, no entregan nada.
Este mismo problema se repite con las deidades, porque el suplemento alienta a incluir las clases de los manuales oficiales, pero sin decir cuáles podrían ser los dioses o los patrones de brujos más allá de un comentario suelto. Esto se podría haber solucionado con algún tipo de tabla donde se nos clasificaron a las grandes criaturas del juego para saber a qué dominio de clérigo pertenecen o qué tipo de brujo podría tenerlos como patrón.
A todo lo anterior se le suma que los arquetipos entregados son extremadamente poderosos en contraposición a los oficiales de Dungeons and Dragons. Los niveles de poder que se manejan en el universo de Runaterra son bastante diferentes y mucho más elevados, de acuerdo, pero tomando en cuenta que solo nos entregan tres (cuando un grupo suele tener cuatro jugadores), inevitablemente alguno se quedará cojo en comparación a sus compañeros.
Algunos aciertos interesantes
A pesar de todo lo mencionado anteriormente, hay muchas cosas destacables en las que vale la pena detenerse.
El texto hace lo posible porque sintamos a Aguasturbias como un lugar vivo, teniendo encuentros aleatorios en algunos lugares, dando descripciones bastante llamativas que nos ayudan a darle personalidad a un lugar que podemos tener más que conocido o que bien puede ser el primer acercamiento del jugador al mundo de Runaterra, y sembrado varias semillas de aventura en caso de que la presentada no sea suficiente para nosotros.
A esto podemos sumarle una trama sencilla, pero muy relacionada a la ambientación que tenemos entre manos: un barco llamado Phantom Ire ha encallado y, junto a los rumores sobre los tesoros que puedan estar dentro, se le considera portador de malas noticias. Dicho y hecho, magia proveniente de las Islas de las Sombras lo ha corrompido, llenando parte de la ciudad con niebla oscura.
Los jugadores serán contratados o amenazados para resolver el problema por dos caras conocidas: Miss Fortune y Gangplank. Con esto aparece otro de sus puntos fuertes: sería muy sencillo para el suplemento abusar del fanservice, pero estos nombres familiares no saturan la aventura. De hecho, estos dos son los únicos personajes del juego en aparecer.
Como detallitos extra, también tenemos varios objetos mágicos y monstruos. Ambos resuman la personalidad propia del juego, están mejor balanceados que los arquetipos presentados y, aunque se ve bastante horrible que algunos sean imágenes de la tienda de League of Legends y otros ilustraciones enteras, varios diseños se agradecen.
Un diamante en bruto
A pesar de sus errores, este me parece un experimento exitoso, entregando material bastante interesante y de forma gratuita, pero no por eso deja de sentirse como algo incompleto.
La razón de esto último es bastante obvia. Con toda la rica ambientación de Runaterra se podría hacer un suplemento mucho más extenso, con razas, arquetipos, facciones y reglas propias que no dejasen tanto trabajo al grupo de juego.
Por esto, aunque Dark Tides of Bilgewater no sea malo, me deja con gusto a poco, porque no puedo dejar de pensar en lo increíble que sería una alianza con Wizards of the Coast que nos entregase un manual completo de League of Legends.