¿Cuántas de las series que hoy en día están en emisión tienen un final preparado de antemano? Obviamente es difícil de decir si siguen en emision. Pero, de aquellas ya finalizadas, ¿cuántas se siente que su final fue preparado y planificado? Probablemente la respuesta a esto sea… pocas. Es bastante común ver series que poseen un final que no satisface a nadie (cof, cof.. Game of Thrones) o que en medio de su popularidad se terminan alargando innecesariamente.
Pero cuando el creador tiene un final (o una meta) en mente se nota. Quizás no lo captemos al momento de verlas, pero sí cuando ciertas cosas se van revelando, hacemos una mirada hacia atrás y pensamos; «ooooooh, por eso es que X cosa fue así». Esto ocurre, a montones, en Mr Robot, serie de 4 temporadas, creada por Sam Esmail y emitida por USA Network, en la que Rami Malek intepreta a Elliot en su intento de arreglar la sociedad.
Excelencia visual
Me sacaré de encima lo más sencillo de mostrar: la calidad técnica de la serie es impresionante. Una cinematografía única, que en ocasiones ni siquiera se ve en películas, le da una personalidad única a cada capítulo. Sólo con unas cuantas tomas, ya se deja ver que, en Mr Robot, lo más importante no serán sus personajes, sino la sociedad que los rodea, muy cercana a la que vivimos nosotros.
La atención al detalle que Sam Esmail puso en su serie es tal, que en el subreddit de la serie, muchos usuarios creaban locas teorías acerca de lo que vendría en el futuro, ayudándose de las sutilezas que, según ellos, el creador ponía intencionalmente en los capítulos. Y en más de una ocasión, acertaron, porque efectivamente algunos elementos estaban puestos con este propósito.
Esta calidad llega a su límite en los capítulos más célebres de la serie. El quinto episodio de la tercera temporada hace lo mismo que 1917 hizo el año pasado: nos muestra todo su desarrollo en un plano secuencia increíble, en el que vemos cómo un grupo de manifestantes se toma un edificio por medio de la violencia. Otro capítulo que hace algo similar está en la cuarta temporada, donde veremos 40-45 minutos en los que sólo se dirán 2 frases al comienzo y final del episodio, logrando, a pesar de esto, mover la trama a lugares muy sensibles con un ritmo impresionante.
Todo el peso en pocos personajes
En general, la serie posee pocos personajes. A pesar de que puedan aparecer bastantes a lo largo de la historia, la serie va moviendo el foco en 3 o 4, poniendo todo el peso argumental en ellos. Evidentemente, con quien más se notará esto es con el protagonista, quien es, sin ninguna duda, el mejor de todos. Con un arco argumental perfecto, Elliot irá, poco a poco, haciéndose más profundo, a tal punto que el cariño que tendremos hacia él será imposible de ignorar. De hecho, cerca del final, hasta lágrimas te va a sacar, lo aseguro.
Los otros personajes que más se llevan las luces serán los intepretados por Carly Chaikin –Darlene- y Christian Slater –censurado por spoilers mínimos-. Aunque también, en ocasiones habrá bastante pantalla para otros, como Whiterose (BD Wong), Tyrell (Martin Wallström) o Dom (Grace Gummer), quienes también tendrán arcos argumentales bastante entretenidos.
El personaje más especial: la sociedad
Pero la serie no es solo acerca de sus personajes. Como dije anteriormente, en el trabajo de cámaras hay un esfuerzo grande en hacer que el espectador tome mucha atención al entorno que rodea a los protagonistas. La sociedad juega un papel fundamental en Mr Robot, y no se contiene en las críticas que le hace, las cuales son fácilmente extrapolables a la vida real.
«Por plata baila el monito» dice un dicho popular. La serie reafirma esto a partir del comienzo, dándonos un genial monólogo de Elliot criticando esta condicion social. Claro, también hay algo de ficción, pues el protagonista es algo paranoico y cree que todo esto está controlado por un grupo de personas «que juegan a ser Dios». Aunque quizás, esto tampoco es tan lejano a la realidad.
Es que el personaje intepretado por Rami Malek no confía en la sociedad. Él es introvertido, de pocas palabras, pocos amigos y evita el contacto físico a toda costa (como el típico ñoño de Hollywood). Por lo que cree que está en sus manos controlar la situación y llevarla hacia su propia utopía. Esta desconfianza es tal, que Elliot ni siquiera confia en nosotros, los espectadores, porque también somos parte de esa sociedad. Esta inclusión del espectador como parte del argumento es increíble, y da lugar a geniales escenas en las que se rompe la cuarta pared.
Toda esta desconfianza y alejamiento del protagonista tiene un motivo. El cual no se revela hasta casi el final, pero le da un sentido a absolutamente cada una de las motivaciones del personaje: La serie siempre tuvo un final en mente, final que se asomaba en cada escena que Elliot dejaba ver su forma de ser.
Conclusión
Mr Robot es la serie más satisfactoria que he visto. Las pistas a su final van apareciendo capítulo a capítulo, temporada a temporada, pero no se dejan ver, hasta que el final te choca en la cara, te sorprende, para posteriormente invitarte a mirar hacia atrás y decir… «woah, todo calza». Todo esto sin dejar de lado su argumento central; la sociedad y la maldad que la controla. Eso sin mencionar las tremendas actuaciones de todo el elenco, ni su innegable calidad técnica.
Pues esta serie es muy distinta a todo lo que hay en la industria. Y a pesar de que esto no siempre es algo bueno, en esta ocasión sí lo es. Una tremenda crítica a la sociedad, con un mundo muy bien construído –y fácilmente creíble, por su semejanza con nuestra realidad- y un tremendo personaje principal, Mr Robot es una serie que todos deberían ver para entender y diferenciar que, cuando las series se planifican, la calidad es mucho mayor.