Review: GRIS – Una danza de colores y sonidos casi perfecta

En el videojuego independiente de Nomada Studio, controlamos a Gris, llevándola a través de lugares preciosos en un viaje provocado por la pérdida.

Escrito por J Martínez

Comiqueros.cl » Vídeojuegos » Review: GRIS – Una danza de colores y sonidos casi perfecta

Sincronía, belleza y delicadeza es lo que nos espera en este título independiente.

Antes de comenzar, todo lo que pueda decir se apreciará más si escuchas esta canción (que es parte de la banda sonora) de fondo.

GRIS es un videojuego independiente desarrollado por Nomada Studio para PC y Nintendo Switch. En él controlamos a Gris, llevándola a través de lugares preciosos en un viaje provocado por la pérdida, viaje en el que, por su puesto, se irán desbloqueando nuevas habilidades que nos ayudarán a avanzar a través del lugar en el que se esté.

Belleza a primera vista

Lo primero que llama la atención de este juego es su aspecto gráfico. Con una combinación entre un dibujo hecho a mano, acuarela y colores fluorescentes se logra un nivel de detalle al nivel de juegos como Monument Valley, Journey o LIMBO. Muy pocas veces visto en el mundo de los videojuegos, las visuales de GRIS logran un efecto que te deja boquiabierto desde el primer momento en que tomas el control del personaje y no te deja cerrar la boca jamás. Y es que no es sólo la primera impresión, ya que a medida que avanzas en el juego, la combinación entre estilos se hace más profunda, sorprende aún más a cada momento y te hace imposible el no detenerte a observar cada pixel de la pantalla para apreciar el detalle que tiene cada escenario. Y esto sin mencionar las animaciones de Gris, detalladas hasta en lo más mínimo.

En el sonido tampoco se queda atrás. La banda sonora compuesta por Berlinist se queda grabada en tu cabeza cuando cierras el juego. El nivel de detalle que tiene, las transiciones que hace, y hasta los instrumentos que usa en cada momento son precisos. Cuando el juego te pone en una situación tensa la música responderá de acuerdo a esto, armando una orquesta de instrumentos y notas muy fuertes, mientras que si te deja en una situación tranquila, en la que admirar el paisaje y los movimientos de Gris, la música se adecuará, usando sonidos muy leves, como puede ser una voz muy suave o un sintetizador que sirve de acompañante más que de atenuante. Los efectos de sonido también están increíblemente logrados, manteniendo una armonía con todo lo que estemos viendo o haciendo.

Y es que todo el aspecto artístico está pensado para trabajar en conjunto con las mecánicas del juego, es por esto que el título de esta reseña es así, las visuales y la banda sonora nunca te van a dejar de llamar la atención. Nunca te vas a acostumbrar a que el juego sea tan bello, y si te llegas a acostumbrar a cierto estilo de arte, cierto color, o cierta melodía que escuches, el juego encontrará la forma de volver a impresionarte con estos factores una y otra vez. Las visuales, el sonido y las mecánicas del juego están, siempre, en una sincronía perfecta.

Simpleza, pero justificada

Y hablando de mecánicas, no las he comentado. Y no lo había hecho hasta ahora porque es el punto en el que GRIS más se resiente. Todas ellas se basan en poder resolver el puzzle de turno y ninguna de ellas es extremadamente innovadora ni te impactará (quizás, personalmente, algo me sorprendió hacia el final del juego, pero más que nada porque me pilló desprevenido). Aunque ojo, en ningún momento son aburridas. Es más, nunca se vuelven ni siquiera repetitivas. Es sólo que, en comparación con las visuales y sonido del juego, las mecánicas se quedan atrás. Tampoco es un juego difícil, de hecho, una decisión de diseño es que no puedes morir ni perder. Aunque hablando de GRIS, no es un juego que necesite ser difícil, ya que su foco va hacia otra parte; su historia. Y su forma de contártela es todo lo que debería hacer un videojuego. Sin texto ni palabra alguna y con muy pocas cinemáticas, todo lo que tiene por contarte te lo contará a través de sus movimientos, mecánicas, visuales y sonidos.

Conclusión

GRIS no es un juego que te quiera desafiar. Tampoco es un juego que quiera que le dediques horas y horas de juego (de hecho, es probable que el juego no dure más de 4 horas).  Por el contrario, es un juego que quiere que conectes con él, con su mundo y con su protagonista, quiere que sientas su dolor, su pena y la lleves a través de ella, superando obstáculos que al mismo tiempo la ayudarán a superar este dolor y hacerla más fuerte. Y con lo dicho acerca de sus visuales, de su sonido y de su historia, sin lugar a dudas lo consigue, quedando en uno las ganas de que más propuestas como esta salgan al mercado y nos asombren como lo hace GRIS.

GRIS está disponible en PC a través de Steam y en Nintendo Switch a través de la eShop a $16.99 Dólares ($7200 CLP).