Reseña: Kajika, el salvador de 1000 almas. La vuelta a la acción de Akira Toriyama

Luego de darse un gustito con Kowa! (cuya reseña puedes leer aquí), don Akira Toriyama volvió a la acción con el manga Kajika, publicado en la revista Shonen Jump en el año 1998.

Tuvieron que pasar 3 años para que el autor del manga más famoso de todos los tiempos, volviera a la acción y a las peleas. Fue así, como en julio de 1998, se publica el primer capítulo de Kajika, en las páginas de la Weekly Shonen Jump de la editorial Shueisha, para finalmente, con un total de 12 capítulos, publicarse el tomo recopilatorio (Tankobon) a finales de año. Por su parte, en España, la editorial Planeta DeAgostini hace lo suyo, publicando el tankobon en el año 99. A su vez, en México, la editorial Vid publica su versión el año 2008. Por último, en el año 2015, la editorial Planeta vuelve a publicar una nueva edición de Kajika en España.

Comencemos a analizar la obra. La primera cosa interesante que vemos, es un autorretrato del autor del manga, Akira Toriyama, donde nos comenta su convicción por tratar de hacer todos sus trabajos el solo, sin embargo, debido al cansancio y desgaste de los años, ha tenido que recibir ayuda de su esposa y hacer uso de la computadora. Además, nos cuenta que por lo mismo, 12 capítulos es el límite para dibujar sus historias (no los 519 de Dragon Ball).

Posterior a este pequeño aviso, vamos ahora sí con la reseña y las viñetas llenas de acción. El manga trata sobre Kajika, un joven con apariencia de “hombre-zorro”, que cuando era niño -producto de sus travesuras- mató a un zorro dejándole caer una roca encima. El zorro, al ser un animal mágico, se convirtió en fantasma y lo maldijo; lo convirtió en un “hombre-zorro” y lo obligó a salvar a mil seres vivos para poder regresar a su forma humana.

Debido a lo anterior, Kajika es expulsado de su pueblo y comienza su viaje en busca de la salvación de las mil almas, acompañado del fantasma del zorro, Gigi.

5 años han pasado desde que Kajika fue expulsado de su pueblo, el clan Kawa -clan conocido por poseer poderes especiales-, y ya ha logrado salvar 990 almas. Es en esos momentos es cuando escucha a una chica en peligro, Haya, quien es perseguida por un grupo de malhechores. Después de salvarla, ella le cuenta que era perseguida porque robó el último huevo de dragón en existencia.

Los últimos dos dragones vivos que quedaban en el mundo murieron en una tormenta, y poco después se encontró un huevo, que quedó al cuidado de un laboratorio en la isla Ronron. Gibachi, líder de una organización criminal, roba el huevo para poder beber de la sangre del futuro bebé dragón y así obtener un poder inimaginable. Es por lo anterior que Haya le roba el huevo y huye, siendo perseguida por los subordinados de Gibachi.

Este se entera de que Haya fue salvada por Kajika y manda a Isaza -uno de los mayores asesinos del mundo y miembro también del clan Kawa- a matar a Kajika y Haya, y recuperar el preciado huevo.

De aquí en adelante, ocurrirán una serie de hechos que no harán más que enriquecer la historia que nos propone don Akira y que a simple vista parece bastante sencilla. Otra cosa que nos invita la lectura, además de adentrarnos en el mundo de Kajika, es lo familiar que se nos hacen los personajes y escenarios. Todo esto debido a que Toriyama volvió a su dibujo que lo hizo tan famoso en los años 80 y 90 con Dragon Ball.

La invitación, como siempre, es a adquirir el manga, ya sea en sus versiones de editorial Vid o Planeta DeAgostini, y poder pasar una buena tarde leyendo una clásica aventura con dragones y peleas. Y en el peor de los casos, una rápida búsqueda por google los llevará a leer el manga en su computador o teléfono.

Nos leemos luego.