Reflexión: del videojuego al cine gracias a Metal Gear Solid

El videojuego ha ido evolucionando demasiado, hasta el punto en que el cine se pudo fusionar con este mismo gracias a las cinemáticas

Escrito por Azerus

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Desde que nació la idea del videojuego, se vio simplemente como una actividad recreativa en donde los jugadores se ponían frente al televisor con un pequeño desafío de por medio en el juego. Dicho reto variaba en función del juego, como golpear grandes masas de enemigos en la calle, encontrar y salvar a una princesa, matar vampiros, ganar carreras, etc.  

En el año 1987 surgió un juego para la NES, llamado Metal Gear, el cual, como clásico juego de la época, contaba con cuadros de dialogo y momentos que cortaban la acción brevemente por dichos cuadros. 

Se podría considerar a esto “cinemáticas”, pero no fue hasta el 98’ en que se pudo observar una verdadera cinemática, pues el ingenioso cinéfilo introducido en el mundo de los videojuegos, Hideo Kojima, había creado Metal Gear Solid.  

La icónica saga en sus inicios fue capaz de introducir cinemáticas en todo su esplendor, utilizando planos diferentes, efectos de cámara, efectos audiovisuales e incluso introdujo créditos, tanto al inicio como al final del juego.  

Fue revolucionario para la tecnología del momento y lo que podría ofrecer la PSX/PS1. Eventualmente muchas más empresas se sumaron al carro, brindado de un toque cineasta a sus videojuegos. Haciendo que de manera repentina, el videojuego se vio inmersa en el arte que es el cine, llegando a un punto en que estas reconocidas cinemáticas se volvieron un estándar para la industria, especialmente en juegos triple A.  

Actualmente, el videojuego se ha visto como una oportunidad de contar historias inolvidables, que hagan sentir, que emocionen al punto de amar los personajes presentados. Por ello la practica cineasta que existe refuerza en muchas ocasiones situaciones impactantes en el transcurso del juego. El cine se conoce como el séptimo arte, pues no es para menos el manejar emociones a través de una cámara. Se desfilan momentos emotivos, en los que varias personas se pueden identificar 

Así pues, el poder ser capaz de llevar dicho arte al videojuego resulta algo totalmente impactante.  

The Walking Dead, un paso más

Pero hay juegos para todos. Como hay para estar disparando hordas de zombis sin dudar, también hay juegos que son para pensar, para reflexionar, para enamorarse, como fue el caso de The Walking Dead, the Telltale Series, publicado el año 2012 

Un juego point’n click inspirado en el comic de Robert Kirkman. En él, la historia se divide en capítulos, como si fuese una serie, dándole un toque más acertado a la serie televisiva del mismo nombre  

También a esto se le suma que una gran parte del juego sucede a través de diálogos y cinemáticas, como siempre han funcionado los juegos de este estilo. Sin embargo, el impacto que tuvo este juego fue grande para el momento, pues fue el cúlmine de la fusión entre el cine y el juego. El jugador podía moldear la historia, haciendo de esta algo totalmente personal, sin dejar de lado todo lo que la desarrolladora quería contar.

Conclusión

Sin duda Metal Gear Solid fue un antes y un después en la industria del videojuego. Su aporte fue de tal magnitud que la práctica de las cinemáticas se ha visto explorada de diferentes maneras.  

No obstante, el cine sería introducido en cualquier momento al videojuego, solo que Kojima tuvo la intrepidez de explorar esto antes que los demás.  

Está claro que el videojuego es flexible en sí mismo. Este es capaz de ser modificado al gusto del creador para brindar experiencias inolvidables. Se pueden crear obras que sean totalmente inmersivas, u obras que solo sean divertidas sin necesidad de contar una historia profunda,  

Pero no cabe duda de que el cine ha aportado mucho a la narración de historias en el videojuego, lo que hace que a día de hoy se puedan disfrutar de aventuras más profundas y personajes más íntimos con los jugadores.