Dentro de los clásicos del cine de terror aparece sin duda alguna The Shining de Stanley Kubrick en cualquier lista. Una de las obras cumbre tanto del afamado director como del reconocido escritor Stephen King. Es protagonizada por el gran Jack Nicholson, Shelly Duvall y Danny Lloyd.
Pese a las diferencias sustanciales entre la novela y la película y el disgusto del resultado de la adaptación de su obra por parte de King, la película ha envejecido de manera sublime y aun da escalofríos. Ahora, si la película produce terror, la historia tras la realización de esta es de locos.
No se podía esperar otra cosa de un director como Kubrick, reconocido como un obsesivo de las tomas y de la perfección. En esta película llegó al limite de su locura y provocó historias que se colocaron en los libros de producciones complicadas en Hollywood. Dejando damnificados y un sinfín de historias que revisaremos a continuación.
El abuso y la perfección
Shelly Duvall, la mujer que le dio vida a Wendy ha hablado en varias ocasiones sobre los niveles de estrés que alcanzó en la producción de la película. Como se ve en el documental sobre Kubrick, este no perdonaba ningún error de la actriz y le exigía un nivel de perfección casi imposible. El director la llevó a tales niveles que Shelly comenzó a perder cabello y algunas escenas en las que lloraba eran llanto real de impotencia.
Kubrick fue catalogado de misógino por el trato que les daba a sus actrices (conocido el caso donde Uma Thurman tuvo que manejar a altas velocidades un auto arriesgando su vida) y en este documental se ve cómo el director recrimina a la actriz de manera muy severa. Humillándola e insultándola frente a todo el equipo.
El Resplandor es reconocida como la película con el metraje más largo de la historia. Si colocamos todas las cintas sumarían más de 400 metros. Un rodaje que estaba pensado en 17 semanas duró 14 meses. Uno de los problemas más difíciles fue la idea de Kubrick de rodar cronológicamente. No pareciera ser un gran problema, pero si consideramos que las tomas aéreas del Overlook era un hotel en Oregón y los interiores eran en un estudio en Gran Bretaña. El equipo viaja constantemente para mantenerse fiel a la idea del director.
La escena en que Wendy ve la maquina de escribir de su marido descubre que ha escrito “All work and no play makes Jack a dull boy”. ¡El problema radica en que la pila de cientos de papeles sobre la mesa dicen lo mismo! Hasta el de más abajo tiene las líneas escritas. Lo peor no termina ahí. Kubrick grabó escenas distintas para las versiones en español, italiano, francés y alemán y en todas se escribió una pila entera de papeles con las frases correspondientes.
El camino a la locura
La locura llegó a su punto máximo con la repetición de tomas. La conversación entre Danny y el empleado del hotel sobre el “resplandor” se grabó 140 veces. La mítica escena de Jack rompiendo la puerta con un hacha se hizo más de 100 veces y requirió 60 puertas. El duelo entre el mismo Jack y Wendy en la escalera 127. Cuando una pelota rueda hacia Danny se grabo 50 veces, hasta que la pelota quedara en un lugar perfecto. Otras de las locuras que se vieron fue la producción de nieve falsa en todas las escenas. Hecha a base de sal pulverizada haciéndola super densa requirió que el equipo usara máscaras de gas… Mientras que los actores se ahogaban. La historia recuerda a The Shining como un clásico y como una producción que mostró lo peor de Kubrick.
Acá puedes ver parte del detrás de cámaras