La nueva película de Dragon Ball nos sitúa varios años en el futuro posterior al torneo de la fuerza y el final del arco en la serie animada Dragon Ball Super.
Pan ya tiene3 años mientras que Goten y Trunks están bien entrados en la adolescencia. Como ya es costumbre, tanto Vegeta como Gokú se encuentran entrenando con Bills alejados de la tierra. En eso la patrulla roja reestructurada y de vuelta en las andadas, recluta a un científico genio para que retome los experimentos y avances tecnológicos del difunto doctor Maki Gero. Su trabajo tiene éxito y crea un par de androides junto a un mejorado Cell. Valiéndose de ellos, la patrulla roja intentará finalmente deshacerse de los guerreros Z que tantos planes les han frustrado en el pasado.
Sin nadie más que los ayude, deberá ser Piccoro quien les haga frente. Por si fuera poco, en simultáneo pretende despertar el instinto peleador de Gohan y que libere sus incomparables poderes. Solo con su ayuda tienen una oportunidad frente al nuevo y formidable enemigo.
Dragon Ball Super Hero, un Super refrito
Lo primero a comentar es algo obvio: es un completo refrito. Las pruebas no necesitan mayor indagación, y la misma premisa ya te revela a qué arco le está copiando: unos nuevos androides y una nueva versión de Cell que son derrotado por Gohan. Es en esencia una vil copia de la saga Androides/Cell de Dragon Ball Z.
Sin embargo, la trama reciclada no se queda solo ahí. Si analizamos en detalle veremos todo lo que se copia. Primero aparece la patrulla roja, que al igual que en la saga androides de Z, está de vuelta con el fin de eliminar a Gokú y compañía. A su vez el doctor Maki Gero es reemplazado por el Dr. Hedo, otro científico genio con la habilidad y tecnología para crear androides en extremo poderosos. Pero como no puede haber una copia de la saga Cell sin un Cell, es que convenientemente los malos tienen documentos sobre la fabricación del original y cómo mejorarlo para que sea aún más fuerte.
Por si fuera poco, Hedo ha construido dos androides (un símil de los androides N° 17 Y N°18) quienes son los primeros en enfrentarse a los héroes antes de que aparezca en escena Cell. Y del mismo modo que en Z, ambos androides no son verdaderamente malos y terminarán oponiéndose a Cell aunque arriesguen su vida.
¿Recuerdan quién fue que derrotó al Cell en su saga? Obviamente para hacer un refrito completo tienes que repetir al héroe original, es decir Gohan, y que sea él quien acabe con el enemigo
Poderes desbalanceados (incluso para los estándares de Dragon Ball)
Todo fan de Dragon Ball ha notado que las escalas de poder se descontrolaron absolutamente luego de la saga de Freezer en Dragon Ball Z. Power ups inmensos, entrenamientos que doblan la fuerza y habilidades únicas para desbloquear el potencial oculto son algunos de los inverosímiles saltos de poder que recibían los personajes. Con todo, Dragon Ball Z sigue teniendo un poco más de coherencia que esta película (y varios pasajes de Super) en donde el nivel de pelea alcanzado por villanos y héroes no tiene ningún sentido.
Partiendo por los androides introducidos en esta cinta, Gamma 1 y Gamma 2. Ambos tienen un asombroso poder de pelea que, en palabras del mismo Toriyama, rivaliza con la fuerza de Gokú y Vegeta en su transformación Blue. Esto significa que unas simples creaciones humanas de segunda categoría (porque no eran la obra cúspide de su creador) estaban a LA PAR de los saiyajin más poderosos y por sobre su modo dios. Si pensamos en Maki Gero y sus obras veremos que es menos inverosímil porque estuvo años juntando datos y células de los guerreros top del universo y en base a ello pudo armar androides con poderes monstruosos. Ahora su sucesor, Hedo, no tiene mucha base para llevar a cabo tamaña maravilla de la ingeniería y la fuerza que logra conferirle a sus creaciones es simplemente absurda y una falla en la narrativa.
Cell Max tampoco se queda atrás. De los planos del original sacaron una versión mejorada que sobrepasa por un amplio margen el poder de los saiyajin. La diferencia con el Cell de Z es enorme y no hay forma de que con meros cambios y mejoras puedan convertirlo en el ser más poderoso del universo.
Gohan nuevamente aumenta su poder con el simple hecho de enojarse y consigue una fuerza mayor a la de Gohan Místico y se convierte nuevamente en el guerrero más fuerte. Si bien Gohan tiene un poder oculto que al ser liberado eclipsa a todo el mundo, el incremento que vemos en esta película supera a todos los que ha tenido en la serie con anterioridad y solamente tuvo que enojarse para pasar de un enclenque a convertirse en el saiyajin máximo con transformación desconocida que funciona solo como una treta para conferirle poder sin mediar razón.
Luego está Piccoro quien por medio de un deseo desbloquea su potencial… que aparentemente superaba al de todos los guerreros. Si consideramos el nivel de pelea que tenía anteriormente comparado con Orange Piccoro, la diferencia es abismal. Posiblemente es el mayor salto de poder que hemos visto en todas las sagas de Dragon Ball.
Oferta: Transformaciones al 2×1
Una crítica frecuente que recae sobre Dragon Ball Super y sus películas son las transformaciones. Y es que en poco tiempo o relativamente pocos episodios, se han incluido demasiadas transformaciones nuevas con sus respectivos aumentos de poder.
En Z también hubo transformaciones, siendo la más recordada de manera indiscutible la de super saiyajin. No obstante, esa se produjo en un amplio lapso de tiempo y episodios (un poco menos de 100), de modo que no se sintió forzada y se dio el tiempo suficiente para que los fans se murieran de ganas de verla.
A su vez, tuvo sus variaciones al romper sus limites de poder que, no obstante, no supusieron un cambio radical en la apariencia del personaje más allá de su cabello y poderes, pero se mantuvieron en al menos una transformación nueva por arco o saga que en promedio sería una (y no tan extrema) cada 100 episodios.
Ni Dragon Ball Z se atrevió a tanto
Tanto en la serie de Super como en la película que estamos comentando, las transformaciones vienen con un fuerte cambio físico que poco tiene que ver con el estado anterior y no se demoran en presentarlas, como si dependieran de ellas para mover la trama.
Lo peor de Super Hero es que dichas metamorfosis aparecen de la nada o de un muy pobre argumento. Primero está Piccoro quien modifica su cuerpo en altura y color tras recibir el don de Sheng Long de desbloquear todo su potencial oculto. ¿Es en serio? ¿Con un simple deseo al dios dragón lograron que el Nameku aumentara su poder en 10 veces o más? ¿Por qué no lo hicieron todos? ¿Por qué no ocurrió antes? ¿Qué clase de poder oculto tenía Piccoro para adolecer semejante incremento? Ni Gohan que es el guerrero con mayor potencial y poder oculto aumentó sus poderes de esa forma. Ni siquiera con el poder extra que le agregó Sheng Long se justifica. Y no hablemos del nombre Orange Piccoro que es una muestra clara de falta de originalidad.
A continuación, tenemos a Gohan en su transformación Beast o Bestial. Es literalmente una transformación sacada del sombrero (para no decir que se la sacó del cul*) que consigue al enojarse. No es super saiyajin ni tampoco es Gohan Místico (que no cambia físicamente) es un invento que se les ocurrió para esta película y vender entradas. No existen menciones previas de algo similar en la serie y no existen antecedentes de su existencia. El poder del guion para hacer a Gohan poderoso nuevamente y darle un look renovado.
Animación
Uno de los mayores atractivos a la hora de promocionar el filme fue su innovadora animación. Con una fuerte carga de modelos 3d, Super Hero presenta una imagen y apartado visual distinto a lo que habíamos visto hasta la fecha en toda la franquicia de Dragon Ball.
Aunque a priori pareciera ser una característica emocionante, en la realidad la ejecución no fue lo que se esperaba. La calidad es irregular y en ciertas escenas parecía que estuviéramos viendo un videojuego de varias generaciones atrás. No obstante, tiene buenas secuencias de acción, peleas que se ven bien y efectos decentes. El problema es que no se mantiene siempre así.
Opinión
Puede que esté siendo muy duro con la película. Si al final de cuentas se trata de dibujos animados enfocados en mostrar peleas épicas llena de poderes y técnicas que se ven geniales en pantalla. Y es que me decepciona lo que nos presenta el señor Toriyama, tomando en cuenta la superioridad narrativa que desarrollaba (dentro de lo que cabe en un animé de peleas) el Dragon Ball de antaño. Y no me vengan con el comentario de que la nostalgia o que se yo, porque les di argumentos (que ustedes concuerden o que tengan fallos es otra cosa) para sustentar mi opinión.
Como fan de Gohan (es mi personaje favorito) esperaba con ansias ver una cinta protagonizada por él, donde además recupera su cetro de peleador más fuerte del universo (dejando atrás su horrible papel en Dragon Ball Z: La resurrección de Freezer) y retoma su fraternal relación con el señor Piccoro. Lamentablemente no cumplió con mis expectativas (ya bastante bajas de por sí) y tengo pocas cosas buenas que decir.
Si a ti te gustó me alegro y espero que no me odies por tener una visión distinta. Si al final del día somos todos fanáticos de Dragon Ball y solo queremos ver un producto que nos guste y nos haga gozar como cuando éramos niños.
¿Encontré algo rescatable?
Para terminar con una nota alegre hay que ser justos y mencionar lo positivo. Como que Gohan Y Piccoro sean los protagonistas y que al fin no sea Gokú quien acapara todas las miradas. Lo otro bueno es que, con los nuevos poderes adquiridos, ambos retoman su relevancia y pueden llegar a tener peso en tramas futuras. Del mismo modo algo bueno fueron (en su mayoría) las peleas, entretenidas y llenas de rayos que cumplen con su cometido.
Entre tanto personaje plano y sin desarrollo, se agradece que al menos Piccoro y uno de los Gamma destaquen. Muestren algo de profundidad, sentimientos y atisbos de crecimiento al final de la cinta.
En fin, esperemos que en la próxima película se esfuercen más en dar un buen producto narrativo. En el pasado han demostrado que son capaces de algo mejor y ojalá retomen ese rumbo.