Reseña: Jigoku Sensei Nube, el profesor del infierno

Misterio, terror, acción y mucho humor es lo que presenta Jigoku Sensei Nube, un anime que se vio en Chile desde el año 2004

Escrito por Andrelo

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En el ocaso del Club de los tigritos de Chilevisión, antes de que este segmento sea reemplazado por Tigritos, se estrenó una de las últimas joyitas del anime por pantalla abierta. Jigoku Sensei Nube, o Nube el profesor del infierno, se emitió por primera vez el 2004, de lunes a viernes seguido de Cazador X, ¿Mejor panorama o mejor panorama?

El anime de 48 capítulos, basado en el manga homónimo, estuvo dos años en las pantallas nacionales (primero en CHV y luego en ETC TV). Aunque pasó sin mucha pena ni gloria, caló hondo en gran parte del público infantojuvenil, quienes, a más de 15 años desde su estreno, lo recuerdan con mucho cariño y nostalgia.

Jigoku Sensei Nube es un manga escrito por Sho Makura y dibujado por Takeshi Okano. Se lanzó en las páginas de la clásica Shonen Jump de editorial Shueisha en 1993, y estuvo en publicación hasta 1999, recopilándose en 31 tankobon (tomos). En 1996, el estudio Toei Animation adaptó el manga en un anime de 48 capítulos, dejando gran parte de la historia sin llevar a la pantalla chica.

Sumado a lo anterior, se han lanzado 3 películas de Nube (una en 1996 y dos en 1997), 3 OVA’s estrenadas entre 1998 y 1999, una serie de televisión de 10 episodios con actores de carne y hueso, y varias secuelas del manga, siendo las últimas Jigoku Sensei Nube Neo (2014-2018) y Jigoku Sensei Nube S (2018-actualidad).

Argumento

“El universo y la tierra, denme más poder para que el diablo se rinda y aparezca la luz de la victoria” es el mantra que siempre reza el profesor Meisuke Nueno antes de hacer uso de su poder espiritual para exorcizar algún demonio, destruir un monstruo, aliviar espíritus en pena, etc.

Nube, como es llamado por sus alumnos, colegas y seres queridos, es un maestro de la escuela primaria Domori. Además de sus quehaceres como profesor jefe, tiene un don especial que ha cultivado desde niño, y le permite detectar presencias paranormales.

De este modo, la serie nos muestra el día a día de los alumnos de la escuela junto a su maestro, el cual hará uso de un monstruo encerrado en su mano izquierda para defender a sus estudiantes de todos los malos espíritus o bestias que quieran causarles problemas.

Como si lo anterior no fuera suficiente, Nube estará en el medio de un triángulo amoroso junto a su colega, la profesora Ritsuko, y de la mujer de las nieves, Yukime. Finalmente, la constante amenaza de Tamamo, el zorro hechicero, hará que el pobre maestro no tenga días de descanso.

Análisis y opinión

Jigoku Sensei Nube es un clásico shonen de los años 90’s, digno de la Shonen Jump. Escenas llenas de acción, humor y altas dosis de fanservice. Aunque pensándolo bien, perfectamente podría calificarse como un anime ecchi (alto contenido erótico, sin caer en lo sexual), ya que cada dos capítulos tenemos escenas bien subiditas de tono, como un monstruo quitándole la ropa a Miki, la profesora Ritsuko desnuda, etc.

A veces es difícil imaginar cómo estas series pudieron ser estrenadas en televisión abierta durante las tardes, sin ningún tipo de censura. Solo pensar la cantidad de denuncias que podría tener hoy en día el Consejo Nacional de Televisión (CNTV), causa más terror que los mismos fantasmas. Aunque si recordamos que cambiando de canal, a esa misma hora daban programas como Mekano, no hay mucho de qué sorprenderse.

Durante la década del 90 y principios del 2000, se vieron en las pantallas chilenas varias series de animación japonesa centradas en monstruos y fantasmas, tal es el caso de clásicos como Mikami, la Cazafantasmas o Kitaro. Sin embargo, Nube tiene algo especial, y es que se centra en la escuela, esa época que todos vivimos, donde los mitos y leyendas urbanas estaban a la orden del día.

¿Quién no escuchó por ahí el mito de algún alumno que murió y ahora pena en la sala? O la niña que murió en un incendio en el baño del colegio. De todos esos mitos populares y leyendas urbanas se alimenta Jigoku Sensei Nube. Todo esto, encabezado por una figura tremendamente carismática como lo es el profesor Nube, porque digámoslo, si Mikami fue la mejor waifu, Nube es altísimo husbando.

Meisuke Nueno es tremendo protagonista, lleno de los valores clásicos del shonen, tales como la bondad y valentía. Pero mejor aún, también muestra dudas y miedos como cualquier persona, lo que lo hace un personaje totalmente humano y verosímil. A todo lo anterior hay que agregar el gran sentido del humor del personaje y habilidad innata para meterse en situaciones chistosas. Gran trabajo de Jesús Barrero (Q.D.E.P.) en el doblaje.

Aprovechando lo anterior, es necesario hablar del doblaje. Generalmente soy partidario de ver las series clásicas en el idioma en que las vimos cuando éramos chicos, ósea español. Personalmente creo que el doblaje hecho en México durante los 90’s y 2000 es bastante bueno. Pero sí, indiscutiblemente, hay muchas cosas que se pierden, y más en series llenas de información cultural.

Durante el doblaje se habla muchas veces de “diablos” al referirse a los demonios o espíritus. Quizás hubiese sido mejor dejar el concepto original yokai, el cual hace referencia a criaturas sobrenaturales (espíritus, monstruos, fantasmas y apariciones) del folklore japonés. Además, se cambiaron algunas cosas como el yen a dólar, y queda un tanto raro que un videojuego cueste 130 dólares en esos años. Fuera de eso, todo bien con el doblaje.      

Más allá de los monstruos, lo que más me gusta de esta serie, son los capítulos donde se tratan temas humanos. Uno de mis favoritos es el de la combustión espontanea. Y no, no es porque Izuna se queda sin ropa cada 10 segundos, sino porque se da una explicación genial. Al pasar de la infancia a la adolescencia, se puede generar un estrés emocional al no poder controlar el desarrollo hormonal (pubertad), lo que termina produciendo esta conducta sobrenatural.

Son este tipo de episodios, que mezclan las temáticas propias de la preadolescencia/adolescencia con actividad paranormal las que hacen de Jigoku Sensei Nube una excelente serie. Sin mencionar capítulos tan emotivos, como el del fantasma de la niña que murió durante la segunda guerra mundial, la cual sigue vagando hasta que Nube la logra liberar y, por fin puede llegar al cielo.

Sin embargo, lo más triste de esta serie fue su abrupto final. Desconozco totalmente la causa de esto y por qué no se abarcó el manga en su totalidad. Se dejaron demasiadas cosas sin respuesta en el anime: ¿Qué pasó con Tamamo? y aún más importante ¿Qué pasó con la maestra Minako encerrada junto al demonio?

Es más, a opinión personal, la serie debió terminar en el penúltimo capítulo (47) en el cual Nube se enfrenta a la criatura más poderosa de todas: el dios de la pobreza. Este episodio ofrece un abanico de emociones y hubiese funcionado mucho mejor como final. Aun así, Jigoku Sensei Nube es una serie que, si no la has visto, tienes que hacerlo sí o sí.

Nos leemos luego.