Seguimos hablando de It a la espera de la ansiada segunda parte de la nueva adaptación de la exitosa novela de Stephen King estrenada hoy en nuestro país. El remake dirigido por Andrés Muschietti se convirtió en la película de terror más exitosa de la historia (económicamente hablando, por supuesto) y se espera que la segunda parte bata todos los récords, no solo de la primera parte, sino que también los que corresponden a la categoría R. Porque si, la segunda parte será mucho más violenta y sangrienta, a diferencia a la primera, que hoy analizamos.
“Les creo”
De partida, la historia (a diferencia de su homónima del 90) parte con El Club de los Perdedores y la película solo cuenta su enfrentamiento. Desde ahí, el elenco es un lujo. Sobre todo, la dirección de actores. Los niños son fantásticos, le creo todo lo que hacen y dicen. El hecho de que la primera parte tenga tintes de comedia ayuda a encariñarse con los personajes. Si de la adaptación de los 90 nos gustaba la relación que tenían los protagonistas en su infancia, lo que hace esta adaptación es para aplaudirla de pie. La primaria tensión amorosa/sexual entre Bill, Ben y Bev está hecha de manera precisa para resaltar y no incomodar.
Punto negativo, Mike pasa 20 minutos sin aparecer en pantalla y para ser alguien que tiene mucho protagonismo en la secuela, podría pesar la falta de desarrollo de personaje… Además, que es el que peor actúa.
Los matones del grupo también aparecen como grandes personajes y significan una evolución en lo que nos habían mostrado en 1990. Henry Bowers si es un villano, es alguien que produce miedo, no rompe represas, le corta el estomago a Ben, mata a su padre y a sus amigos (en una escena que fue eliminada).
“Le temo”
Bill Skarsgård se podría graduar de Pennywise definitivo si logra replicar su maravillosa actuación en la parte dos. Si nos fijamos bien, las partes más terroríficas de la película son las expresiones de It, las miradas al vacío, ese ojo desviado, la baba cayendo de una boca llena de pintura… La actuación es magnifica y aterradora. Replica la formula de Tim Curry de humor y terror, pero de manera mucho más sutil. Los efectos especiales ayudan enormemente a crear un personaje realmente terrorífico.
Sin contar su origen se logró dar a entender la esencia de Pennywise y su necesidad de alimentarse de carne humana saborizada con miedo.
“Lo entiendo”
Para quienes leyeron el libro de más de mil páginas, la película ofrece un sinfín de referencias. Desde el Dios tortuga hasta la aparición de Patrick Hockstetter. La relación entre Bev y su padre, todo es muy oscuro, pero pintado con una brocha de alegría y felicidad. Pero lo mejor de la película es la estética, las tomas, las imágenes, el ambiente que genera. Andrés Muschietti se luce como un gran director. La secuela promete… Ya esta disponible en los cines y te dejamos el trailer.