Monos Piluchos: el debut literario de No estoy creici

El debut literario de Fernando Castillos, mejor conocido como noestoycreici: Monos Piluchos, ser un niño gay no saber qué hacer.

Escrito por Muerto

Comiqueros.cl » Literatura » Monos Piluchos: el debut literario de No estoy creici

A la hora de leer libros de temática gay podemos encontrar una amplia gama de romances de todo tipo. Amores ideales, historias trágicas llenas de sufrimiento, otras de superación y algunas que logran sobreponerse al inmenso odio de la sociedad. Situaciones distintas, pero con un mismo factor: el amor. Dos hombres que se sienten atraídos el uno por el otro, y es precisamente ahí, en donde Monos Piluchos se diferencia.

Este tipo de relato siempre muestra cómo los protagonistas terminan encontrando el amor típico de los cuentos de hadas. Mas, la mayoría de las veces no suelen hablar de cómo los personajes van descubriendo aquella atracción de forma lenta y solapada, cómo hay pequeñas señales en su infancia y atisbos de que son distintos al resto. A diferencia del 60% de los libros LGBT+, Monos Piluchos no está para nada centrado en el romance, es más, ni siquiera lo hay. Es pura introspección, cuestionamientos y señales.

Fernando Castillo, mejor conocido como @noestoycreici, es un influencer y comediante chileno activista de los derechos de la comunidad LGBT+, el cual es más conocido por su podcast Weona que creici. Gracias al interés de la editorial Planeta, logró publicar su libro de autobiografía ficcionalizada, en donde cuenta la historia de cómo un pequeño joven descubre su homosexualidad a medida que comienza a dibujar en su cuaderno a los personajes de Dragon Ball Z.

Sinopsis de Monos Piluchos

Sebastián es el hijo menor de una pequeña familia de escasos recursos de un pueblo costero. Su padre es camionero y no pasa demasiado tiempo en casa, su madre se dedica a las labores del hogar y su hermano mayor parece nunca entenderlo. Con la inocencia propia de un niño ve cómo se comporta la gente a su alrededor y se empieza a cuestionar por qué no puede ser como los demás chicos de su edad, por qué no le interesan las mismas cosas y por qué no puede comportarse con total naturalidad.

Las preguntas se acumulan en su interior y tristemente no hay nadie que lo pueda acompañar en este viaje. Lo único que puede hacer es dibujar en su cuaderno a sus personajes preferidos, aquellos personajes que logran distraerlo día a día. No obstante, lentamente sus dibujos empiezan a adquirir un tono más sexualizado…

Con un total de 16 capítulos desarrollados en un poco menos de 175 páginas, conocemos la historia de Sebastián, quien solo desea entender qué es lo que lo hace ver el mundo tan diferente.

Sobre el libro

Lo bueno del libro es que tiene una fácil lectura y avanza muy rápido (demasiado para mi gusto). Como es el mundo interno de un niño tampoco tiene un nivel de abstracción intelectual tan complejo, por lo cual es perfecto para llevarlo a cualquier parte y leerlo mientras estás en el bus o esperando a alguien. Debido a su autor, la historia posee grandes dosis de comedia y chistes fáciles de entender.

Sin embargo, lejos lo mejor del libro es su cercanía, lo real y humano de la historia. Las personas de la comunidad pueden sentirse reflejadas fácilmente, y quienes no lo son, pueden tener un acercamiento a ver cómo es crecer distinto al resto y no saber cómo hablar de ello.