El libro La grieta (Emecé) es la primera novela de la editora Catalina Infante, quien ya se había aventurado con cuentos y relatos. Es una novela corta, de 143 páginas, muy rápida y fácil de leer. Eso no quita que la historia tenga varias reflexiones certeras y que van al hueso.
La grieta nos habla de una mujer que acaba de ser madre y que, a su vez, tuvo una particular relación con la suya. Ha vuelto a la casa materna, a habitarla, pero su madre, Esther, ya no está. Así, va reconstruyendo postal a postal (literal, revisa postales que encuentra en la casa) la relación con su madre, que ha dejado un gran vacío luego de su muerte.
La identificación con La grieta
No todos se sentirán identificados con los sucesos maternales del libro, pero en mi caso me pasó. Muchas de las dudas y miedos que tiene la protagonista son los mismos que tuve al convertirme en madre. Para quienes no han traído un hijo o hija al mundo (y también incluyo a los hombres) puede servir como una aproximación hacia el sentimiento de la maternidad. La maternidad es una fisura, en todas sus direcciones. Tanto hacia la maternidad de nuestras madres, como la maternidad hacia nuestros hijos. Puedes tener una muy buena relación con tu madre, pero hay fisuras ahí, incluso si no puedes verlas, están, con el riesgo de convertirse en una grita más grande y derrumbarlo todo.
La vida de la protagonista se tambalea, las cosas ya no son como solían ser, todo parece derrumbarse mientras recuerda a una madre que no puede ayudarla a maternar porque ha muerto. Sí tiene el apoyo de su suegra, otra maternidad que se entrecruza entre las dos con las que tiene que lidiar la protagonista.
«La grieta es un resquicio en la memoria. Nos asomamos a la maternidad sin ornamentos, al lamento en un cuerpo trémulo y la resignación ante relaciones resquebrajadas y vidas agotadas. Catalina Infante escribe con una empatía conmovedora, que logra que el estoicismo se torne poético y el tormento se vuelva bello».
Mike Wilson
La grieta es un libro reflexivo. El conflicto es común y lo viven miles de personas todos los días. No califico esto como bueno o malo, solo digo lo que es, y funciona. Como decía, para mí fue muy fácil sentirme identificada y, por lo mismo, la novela goza de una gran verosimilitud.
Lo que no me gustó tanto
Si bien de manera global creo que es un buen libro y lo recomiendo, no soy fanática del final. Sin caer en spoilers debo decir que me deja un halo de esperanza que no me gustó tanto. Quizás soy una pesimista sin remedio, pero el final, sin decir demasiado, me decepcionó. Me pareció condescendiente, como una mano dando pequeños golpes en el hombro. Me hubiese gustado algo más duro y definitivo.
Sobre la autora
Catalina Infante nació en Buenos Aires en 1984. Es escritora, editora y magíster en Periodismo Escrito. Ha publicado en coautoría tres libros de relatos de pueblos originarios chilenos y fue nominada dos veces a los Premios Altazor por este trabajo. En 2014 publicó la nouvelle La otra ciudad, en 2015 el libro álbum Dichos redichos y en 2016 el libro objeto Postal nocturna. Fue columnista de revista Paula y su primer libro de cuentos en solitario fue Todas somos una misma sombra publicado en 2018.
Es una autora para tener en la mira, con una escritura muy prolija y certera.