Con nueve películas de Spider-Man estrenadas hasta la fecha, es interesante detenerse y analizar rápidamente cada una de ellas y ver cómo se han mantenido o envejecido con los años. A continuación, un top 9 ordenado de la peor a la mejor película, tomando en cuenta diversos factores cinematográficos. Ojo, no incluyen las películas con Los Vengadores.
9. The Amazing Spider-Man 2
Todo lo que no debe hacerse para llevar a cabo una buena película, termina siendo el resultado de esta secuela. Es inconsistente con su tono, no tiene coherencia en relación al estilo mas “realista” de su predecesora y el ritmo se hace pesado. Hay un exceso de villanos poco carismáticos, sumamente exagerados y con un desarrollo bastante pobre. Lo único destacable es la química entre Peter Parker y Gwen Stacy, que se siente real y es entretenida de ver. Da la impresión de que quisieron abarcar demasiado, pero terminaron logrando muy poco.
8. Spider-Man 3
Es una experiencia frustrante. Por un lado, las escenas de acción y todo lo relacionado con la historia del personaje de Flint Marko (Sandman) funciona muy bien y es emocionante. Pero la historia de Peter Parker se queda a medio camino. La cinta pierde la sutileza que había logrado su antecesora y algunas escenas se sienten forzadas, extendiéndose más de lo que deberían. El mayor problema de Spider-Man 3 es que el guion tiene muchas subtramas y al final no todas cierran de manera satisfactoria. A pesar de que tiene momentos bien realizados, es la menos lograda de la trilogía de Sam Raimi.
7. The Amazing Spider-Man
La primera película del Spider-Man de Andrew Garfield tiene lo suyo. La dirección de Marc Webb es sólida, sobre todo en los momentos más íntimos y alejados de la acción. Andrew Garfield es convincente como Peter Parker y su interpretación es muy carismática. El problema del filme es que no ofrece nada que no hayamos visto antes y su villano es poco memorable. Si su secuela peca de ser muy ambiciosa, esta peca de ser poco arriesgada y poco novedosa. Pero, es una película que cumple, que tiene muy buenas actuaciones y sobre todo buenas intenciones.
6. Spider-Man: Far From Home
Sin lugar a dudas, es la cinta más cómica y relajada del arácnido hasta la fecha. Tiene tintes de comedia romántica y a primera vista parece una aventura más pequeña, pero la historia evoluciona para mejor a medida que avanza el metraje. Al igual que con su antecesora, tiene un giro inesperado y un villano muy bien logrado. Mysterio, la acción y la dinámica entre Peter Parker y Nick Fury son aspectos destacables. Sin embargo, hay demasiadas referencias al MCU que se sienten forzadas. A pesar de todo, es una buena secuela y cumple con avanzar la historia a lugares interesantes.
5. Spider-Man
La primera película de Spider-Man es todo un acierto en cuanto a casting y fidelidad al comic. Tobey Maguire, realiza un excelente Peter Parker y Willem Dafoe es inolvidable como el Duende Verde. Desde la dirección de Raimi, hasta la música de Danny Elfman, la cinta consigue una atmósfera muy propia de los años 2000s. Quizás en términos generales no es muy creativa ni arriesgada, pero la historia no pierde tiempo y es bastante directa y efectiva. Se nota el cariño y las ganas de querer contar una buena historia de origen con momentos inolvidables.
4. Spider-Man: No Way Home
Así es, la más reciente película es una completa locura y el resultado es más que satisfactorio. La interacción que hay entre los personajes nuevos y los villanos que regresan está muy bien lograda y se hace muy entretenido de ver. Además, continúa la historia de su antecesora de manera fluida y se lleva a otro nivel mucho menos predecible. Lo más destacable es que a pesar de que es una película muy recargada de personajes y momentos épicos, sigue siendo una película del Spider-Man de Tom Holland. Se siente como un cierre a su trilogía y se prioriza su viaje emocional sin que todos los demás hechos y personajes lo opaquen.
3. Spider-Man: Homecoming
Algo muy rescatable de Homecoming es la simpleza de su historia. No pretende nada extraordinario, solo contar una buena historia de los inicios de Peter Parker como Spider-Man. Se nota que su director, Jon Watts, comprende bien a los personajes y la forma en la que se desarrolla la trama es muy interesante y con giros inesperados que aportan al conflicto central. Michael Keaton es muy convincente como el Buitre y logra ser memorable. Es verdad que tiene una esencia y enfoque más juvenil que otras cintas pasadas, pero eso no significa que sea menos intensa y menos lograda.
2. Spider-Man: Into the Spider-Verse
En 2018 llegó la adaptación mas extraña, divertida y original del arácnido. La historia funciona porque se siente fresca y diferente a todas las demás películas. Los personajes tienen sus motivaciones bien definidas y a la vez tienen una razón emocional por la que están ahí. Uno logra empatizar con ellos y son el corazón de la película. Además, técnicamente es impecable. La animación es muy especial, da la sensación de estar viendo un cómic en la pantalla grande. En fin, es un experimento arriesgado y original que vale la pena.
1. Spider-Man 2
Un filme profundo, que toca temas más reales y cercanos a nuestro diario vivir. Esto se refleja en el arco del personaje de Peter Parker en la cinta. El protagonista toma la decisión de soltar con lo que carga por un tiempo y alejarse sus responsabilidades como héroe y concentrarse en él mismo. Es técnicamente superior a las demás dentro de su saga en muchos los aspectos. Más profunda y con más matices. Alfred Molina como el Doctor Octopus es un villano icónico e impredecible. Si su antecesora no era muy creativa y arriesgada, está es una secuela que mejora absolutamente en todos los aspectos y profundiza aún más en el verdadero significado de ser un superhéroe. Lo que implica ser Spider-Man y lo que se esta dispuesto a sacrificar para lograr otras metas y objetivos en la vida.