El Doctor Mortis es un ser multidimensional y multimedial, una criatura del terror clásico que se escabulle por los géneros de la ficción. Nacido de la pluma y la voz de Juan Marino Cabello, es el radioteatro más trascendente de la historia de la radiofonía chilena.
Sus terroríficos relatos publicados como historietas se convirtieron en un referente durante la época de oro del cómic nacional y además pasó por la televisión con éxito discreto. Pero por sobre todo ha mantenido a varias generaciones atentas leyendo o escuchando al borde del sepulcro.
Desde los años 40 que su autor Juan Marino, relató historias de terror enmarcadas en la característica risa del tenebroso Doctor. Puede ser un vampiro milenario, un científico obsesionado con los cadáveres, el criminal más buscado del mundo o una simple sombra. Mortis puede ser protagonista, antagónico, un personaje secundario o simplemente no aparecer en las narraciones.
Con la adaptación al cómic a finales de la década del 60 el siniestro personaje fue consolidando una apariencia elegante y refinada, inspirándose en el semblante de Vincent Price, un destacado actor de películas de terror. El Doctor Mortis era un mestizo entre el Drácula Hollywoodense, el Mefistófeles de Goethe y el Diablo criollo.
La realización constante de guiones llevó a Juan Marino a convertirse en un artesano del horror. Las narraciones podían estar ambientadas en distintas épocas y lugares. En historias autoconclusivas se asomaban fantasmas, zombies, vampiros, ocurrirían asesinatos, revivían muertos de diversas formas, aparecían extraterrestres, seres de otras dimensiones; es decir, toda la galería del horror concebida hasta fecha por el cine masivo , la literatura y la tradición oral.
El poderoso, despiadado y cosmopolita Doctor podía pasearse por cualquiera de estos escenarios. Utilizando una de sus muchas identidades: Tyss Morgan, Tiseran Morgue, S. Miron, Baron de Stroim, etc.
Pasando por diferentes casas editoriales los cómics del Dr Mortis sumaron más de 170 historias publicadas hasta 1977, muchos artistas trabajaron en la realización de las viñetas que seguían la estética del cómic norteamericano. Entre ellos Máximo Carvajal, Santiago Peñailillo, Manolo Ahumada, Avelino «lino» García por nombrar algunos. Resalta la maestría del arte de las portadas, impecables acuarelas que sugerían historias de horror no necesariamente relacionadas con el contenido interior de las revistas. Destaca especialmente el trabajo de Manuel Cárdenas y Sergio López.
El radio teatro dejó de transmitirse en los 80 y el Doctor Mortis se convirtió en un recuerdo y una referencia cultural. El comentarista Rodrigo «Pera» Cuadra, ha declarado que es «la mejor revista chilena de historietas de toda la historia» Dedicándole una canción con su grupo de Metal «Dorso».
Antes del metal fue la cumbia y existe un disco que se llama El Dr Mortis y sus zombies cumbiancheros.
http://www.youtube.com/watch?v=8CcC1UUEF1U
En el año 2011 una veintena de historias fueron reeditadas y vendidas en los kioscos y librerías. Este fue un preludio a un retorno y actualización del personaje en 3 publicaciones In absentia Mortis, Mortis eterno retorno y In nomine Mortis.
In absentia Mortis es una colección de 18 relatos cortos, realizados por distintos equipos de trabajo, publicados como web cómic, una serie de revistas de distribución gratuita y una compilación. Este libro ganó la Medalla colibrí a la mejor escritura juvenil del año 2012.
Mortis eterno retorno, es una novela gráfica guionizada por Miguel Ángel Ferrada y dibujada por Ítalo Ahumada. Aquí se narra los preparativos del ritual para traer de vuelta al Siniestro Dr. Mortis. Esta obra además es parte del catalogo de la revista Heavy Metal, bajo el sello Virus que publica a destacados autores alrededor del mundo.
In nomine Mortis es una colección de 9 relatos gráficos, realizados por varios autores y dibujantes, todas antecedidas por una ilustración de Claudio Romo. En este libro se muestran las consecuencias de la liberación de nuestro protagonista.
El Doctor Mortis trascendió su origen como una tenebrosa voz en una radio al extremo sur de un país austral, su legado permanece en el tiempo y atraviesa fronteras. Es un monstruo clásico por derecho ganado, la piedra angular de todo un universo ficticio que tiene tradición y potencial de expansión.