Kilian y El Papiro Sagrado: Valor, aventura y amistad

Una de las más recientes obras publicadas por Áurea Ediciones que causa furor en la literatura fantástica chilena: Kilian y el papiro sagrado

Escrito por Zahorí Balmaceda

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Desde sus orígenes, Áurea Ediciones se ha destacado por llevar la fantasía a sus lectores. Kilian y El Papiro Sagrado, perteneciente a este género, ha causado furor desde su lanzamiento dentro del público juvenil.

Esta aventura es capaz de transportar y guiar por un viaje a través del tiempo y mundos que la naturaleza nacionalista de la literatura chilena a veces se muestra reacia a mostrar. En esta breve novela nos adentramos en la fantasía única del Antiguo Egipto, descubriendo el poder de sus reliquias y el misticismo que las rodea.

Libro de Kilian y El Papiro Sagrado y la libreta de notas, ambos disponibles en la página de Áurea Ediciones.

Sinopsis

Cuando los dioses del Antiguo Egipto deciden “jugar” con las almas de aquellos a quienes reclamarán luego de su muerte, crean un libro mágico para seleccionar a sus mejores guerreros.

Kilian, un joven chileno cuya vida varía entre el colegio, la rutina con sus insoportables hermanos y la ausencia de su madre en casa, se enfrenta “accidentalmente” a un viaje épico donde su valor será puesto a prueba y forjará lazos con entrañables personajes que, desde la primera entrega, marcarán un antes y un después en su vida.

Ilustración de Kilian y El Papiro Sagrado.

Un golpe de fantasía

Tal vez una de las razones por la que la historia de Kilian tuvo tanta aceptación en tan poco tiempo, es porque se apega a la fantasía clásica de manera simple y sin rodeos. No hay grandes reglas de universo, no hay una tediosa cantidad de personajes que le den forma a una historia ni detalles excepcionales que definan la forma en que se comprende el relato.

Kilian y El Papiro Sagrado es una breve novela que cuenta hazañas y aventuras sin llegar a ser pretenciosa y deja en su experiencia un sentimiento que puede asimilarse al ver una película fantástica en la niñez y recordarla de adulto con el amor y respeto que esta merece, pues cada palabra cuenta lo justo y necesario.

Atreyu y Falkor, de La Historia Sin Fin.

Los amantes de la cultura pop de seguro entenderán cuando puede compararse el leer Kilian con ver —o leer— La Historia Sin Fin, no solo porque ambos relatos tienen en común la aventura de un chico que se enfrenta por primera vez a un desafío para el que nunca fue preparado, sino porque posee esa sensación casi única de haberse maravillado con una gran aventura contada en palabras simples.

El reflejo del miedo

Siendo una historia de fantasía, de seguro “el miedo” es tal vez el último de los tópicos en los que una historia como esta podría profundizar, pero nuevamente Kilian sorprende; a través de su narrativa, J. G. Audoriza, su autora, describe muy bien emociones que son difíciles de expresar en palabras y hacer que los lectores se identifiquen, emociones como el miedo.

En la ficción, nunca es bueno crear personajes perfectos que se adapten a todo tipo de circunstancias o que salgan de ellas sin haber aprendido una lección o siendo lastimados de alguna forma por los eventos y Kilian no cae en este pecado de la narrativa.

Como un joven “sin nada especial”, Kilian encara a la muerte y a todo lo que ella abarca: el miedo, el dolor, la inseguridad, etc, pero verla a los ojos no quiere decir que esta no pueda afectarlo por el simple hecho de ser “nuestro héroe”.

En resumen, Kilian es la prueba viviente de que los protagonistas de las historias son más creíbles y aceptados cuando lo que los hace especiales no los aleja de lo que los humanos son en realidad: seres frágiles que, con una gota de voluntad, pueden llegar muy lejos.

Lo malo

Esta es una historia adorable y no solo en el sentido tierno, sino también en la forma en que el lector logra encariñarse con los personajes y preocuparse por ellos y las cosas que puedan pasarles. Aunque nada de eso quita el único comentario negativo que se ha vuelto recurrente entre sus lectores: el libro es demasiado corto.

Con 111 páginas, la historia logra enganchar a quienes se sumergen en sus páginas, pero la rápida lectura casi hace que su final parezca abrupto. J. G. Audoriza, ha asegurado que esto se debe a que su intento por publicar la primera parte de Kilian y El Papiro Sagrado ameritaba que la historia no se extendiera innecesariamente, pero —y para la tranquilidad de sus lectores—, la segunda parte de la saga podría dejar satisfechos a sus seguidores en este sentido.

J. G. Audoriza y su libro.

Lo que se viene

Para los amantes de Kilian y El Papiro Sagrado, la espera por la segunda parte de la entrega se hará menos tortuosa gracias a un proyecto que Áurea Ediciones tiene entre manos, algo que traerá de vuelta una parte de esta historia antes de que la segunda parte vea la luz y que, de seguro, entregará atisbos de las respuestas de algunos de los misterios que la primera parte utilizó para encantar a sus lectores.

Aporte a la cultura nacional

Actualmente Kilian y El Papiro Sagrado ha tenido un gran nivel de difusión en colegios, algo que ha aportado enormemente a su difusión.

Viéndolo desde ese punto, este libro es una buena forma de acercar a las personas jóvenes a la literatura que se relacione con la mitología, porque no está mal quedarse con —por ejemplo— Percy Jackson y su franquicia, pero está mal creer que el conocimiento o interés histórico solo puede obtenerse de una fuente donde la fantasía y los mitos de la humanidad se mezclan de tal forma en que no pueden diferenciarse uno del otro, especialmente porque la mitología universal es infinita, ya que nunca se termina de descubrir.