6 mejores alternativas al Ludo

Originado como Parchisi o Chaupar alrededor del siglo 6 AC, y luego patentado como Ludo en Inglaterra y Parcheesi (y luego Sorry) en Estados Unidos, es indudable que este es un juego con mucha historia. Pero si hay algo seguro es que, cuanto más tiempo pase, más probable es que te veas superado por otros, seas quien seas. Y eso se cumple con personas, ideas u objetos, como en este caso. En esta entrada en la saga de «Mejores Alternativas» abordamos el juego más antiguo hasta ahora, el Parchisi o, como se lo conoce hoy en día en estas latitudes, Ludo.

El Ludo es un juego clásico que es posible encontrar en muchas casas de familias en el mundo. Las reglas pueden variar entre sus diferentes versiones, pero en su mayoría son bastante constantes. Rodar dados, mover piezas por un tablero, «comer» las fichas de los oponentes e intentar ser el primero en llevar a todas las piezas a la «zona segura».

Lamentablemente, esas mismas características definitorias son las que lo hacen en gran medida obsoleto. La mecánica de tirar un dado para determinar movimiento o acciones está casi en desuso, y por buenas razones, ya que deja todo al azar. La acción de eliminar fichas del oponente del tablero no está mal, pero combinada con que la forma de terminar el juego sea llevando todas las fichas a la zona segura, resulta muy frustrante. Sin contar que extiende la duración del juego.

Así que hoy les comento 6 mejores alternativas al Ludo, tomando en cuenta diferentes aspectos que pueden resultar atractivos del juego. Como siempre, traté de elegir juegos que puedan encontrarse en el mercado actualmente, y tengan algún elemento en común con el juego que «reemplazan». Sin más que decir, vamos a la lista

Mancala

Quizás lo que te atrae del Ludo es su importancia histórica, que sea un juego que ha sobrevivido a más de un milenio de historia humana. Si ese es el caso, permíteme presentarte Mancala: un juego cuyos orígenes pueden rastrearse hasta el 1400 AC. Más antiguo incluso que el antecesor de Ludo, Parchisi.

La ventaja de Mancala sobre el Ludo no es solo que sea más antiguo, también es un mejor juego en varios aspectos. No depende del azar, sino de la estrategia. Es más sencillo de enseñar y aprender. Y aunque está disponible todavía para la venta, también puede improvisarse muy fácilmente con elementos al alcance de la mano. Una mejora por todos los frentes.

La Liebre y la Tortuga

Una de las cosas que pueden resultar atractivas del Ludo es la carrera, la sensación de sacar un número alto en el dado y avanzar muchos espacios. Con La Liebre y la Tortuga, puedes experimentar una carrera, pero sin el azar de los dados.

Cada jugador intenta que su personaje gane, y a la vez apuesta por otro. En lugar de dados, el movimiento se determina de forma colaborativa entre todos los jugadores, utilizando cartas reveladas simultáneamente. Mucho más estratégico, y gracias a que la tortuga siempre se mueve un espacio sin importar lo que suceda, hay un final cierto para el juego aunque los demás personajes no avancen.

Formula D

Si la sugerencia anterior no te interesó porque «no es lo mismo sin dados» o «no quiero pensar en lo que hagan los demás, quiero correr y punto», no temas. Formula D es la opción para ti.

En Formula D cada jugador maneja un auto de carreras intentando conseguir el primer lugar en una carrera. Acelerando y maniobrando, tirando dados cada vez más altos para avanzar a toda velocidad. O quemar tu motor o derrapar fuera de la pista. Mucho más adrenalínico que el Ludo, y sin dudas mucho más bonito de ver, gracias a la buena calidad de sus componentes y diseño.

Deep Sea Adventure

«¡Pero a mí me gusta ser una mala persona y perjudicar a los demás jugadores!», puede que digas ahora. Bueno, primero, que feo de tu parte. Y segundo, prueba Deep Sea Adventure.

En este juego también se lanza un dado para avanzar, en este caso descendiendo al lecho marino para rescatar tesoros. Pero el oxígeno es compartido por todos los jugadores, y cada turno debajo del agua gasta las reservas de todos. ¿Quieres ser una mala persona? Agota el oxígeno para que nadie pueda obtener puntos. O llega a la cima de la maldad, logrando regresar al submarino con el aire justo para que todos los demás mueran y solo tú puntúes tus tesoros. Maquiavélico.

Tiburón

Sigamos en el agua, pero esta vez con Tiburón, un juego en el que los jugadores interpretan a robots (podrían ser humanos, pero sería mucho más sangriento) intentando escapar de un tiburón.

La similitud con Ludo pasa, al igual que en Deep Sea Adventure, por la sensación de «joder» al otro. Pero en este caso, ya que el movimiento sucede según cartas jugadas simultáneamente (similar a La Tortuga y la Liebre) el juego se vuelve más estratégico. Podría discutirse que la sensación de superar al oponente debería ser más fuerte incluso, porque no solo lo fastidiaste, además lo hiciste superándolo mentalmente.

El Testamento de la Tía Ágata (o Aurora) / 13 Dead End Drive

Finalmente, El Testamento de la Tía Ágata. ¿Se acuerdan de ese juego? Deberían, porque le hice un análisis de 2 partes hace unos años.

Aquí, cada participante controla a un grupo de personajes, los cuales intentan escapar de una mansión siendo los herederos de la fortuna de la difunta tía homónima al juego. Sin embargo, la mansión está llena de trampas, y cualquier jugador puede mover cualquiera de las piezas de personaje, llevando a sus oponentes a la muerte y sus piezas a la victoria.

Este juego es similar al Ludo en el uso del dado para determinar movimiento, y la acción de eliminar piezas oponentes, pero aquí se realiza de forma mucho más interesante, con roles ocultos y engaño. Es un poco difícil de conseguir, pero lo recomiendo mucho.

Y esas han sido todas las recomendaciones de esta nota. Como siempre, si se les ocurre algún otro juego para someter a este tratamiento, soy todo oídos.