«Slaves» y un interesante cierre – Editorial CK

Si has estado siguiendo el «especial» dedicado a Matías Palma sabrás que Slaves es el último de sus proyectos junto a la Editorial CK.

En esta ocasión nos narra la historia de un grupo bastante especial de astronautas que se encuentran en el espacio recolectando ciertas criaturas muy extrañas que generan piedras preciosas en su estado más puro, dejando en claro qué tipo de raza son los Slaves y su propósito, además de un contexto «histórico» por así llamarlo. Nos enteramos que son mercaderes milenarios y su raza está presente en más de 15 sistemas solares, lo que abre posibilidades infinitas dónde Palma puede comenzar a hilar sus futuras aventuras.

Por azares del destino el grupo se ve envuelto en un accidente espacial quedando varados en un planeta que en más de alguna ocasión se ha mencionado en sus otras entregas, hablamos de Mandrágora.

Estando en el planeta seremos testigos de los traumas que ha generado el accidente en los protagonistas y viviremos junto a ellos parte de sus «alucinaciones» y pesadillas. La tensión y frustración por la situación en la que se encuentran estará a flor de piel y deberán tomar decisiones, difíciles decisiones, que te harán cuestionar el comportamiento de los protagonistas.

A medida que te aventuras en la lectura de 4 capítulos empatizarás con los astronautas y rogarás porque encuentren una salida del planeta, donde pareciera que cada elemento tenga vida propia. ¿Podrán los sobrevivientes escapar de Mandrágora?…

Eso es a grandes rasgos Slaves, drama, aventura y suspenso pueden resumir el cómic, que cubre algo más de la mitad del impreso, mientras que en las páginas restantes, Palma, nos presenta otra historia, relacionando de manera magistral sus trabajos anteriores.

Ver más allá

Tras creer haber terminado Slaves aparece una esta pequeña historia donde Palma nos muestra un personaje misterioso. Un observador, al parecer, con poder casi ilimitado, bastante similar a Heimdall (Marvel) y nos da un pequeño avance de hacia dónde apunta el universo Mandrágora.

Se nos enseña que en el corazón del planeta existe una puerta principal que lleva a una habitación llena de puertas por las que, a través de los cerrojos, este ser puede observar todo lo que quiera. Sin embargo, al final del pasillo existe una puerta con el siguiente grabado «MANDRAGLO» y no tiene cerrojo… La explicación a esto es sencillamente fenomenal, Palma se luce y nos deja muy intrigados a lo que vendrá próximamente, pero se los dejo como tarea, compren el cómic y sorpréndanse.

Respecto al dibujo, no hay nada que no se haya dicho antes. Es sencillamente espectacular, cada viñeta es una obra de arte. Los detalles con tiralíneas son impresionante, logra profundidad y su trabajo se vuelve de colección. Muy recomendada la obra de esta joven promesa.

Si deseas saber algo más de los trabajos de Palma, te invito a leer la reseña de Púas en la hojarasca y Éxodo Abisal y próximamente Ciclo Felino de la editorial Desastre Natural.