Reseña: The Silver Surfer Parábola – Stan Lee/Moebius

En este volumen de tapa blanda de la editorial Deux Studio, se compilan cuatro números que juntos generan lo que es conocido como “The Silver Surfer Parábola” una historia concebida por Stan  Lee y Moebius (Jean Giraud).

Esta peculiar unión difícil de imaginar, se dio por un encuentro en 1988, al terminar una Comic Con, Lee y Moebius se sientan a tomar un café, donde, entre bromas, nace la brillante idea de generar un proyecto juntos.

Stan Lee, creador en ese entonces de Los Cuatro fantásticos, Iron Man y Spiderman, entre tantos otros, debía idear una historia que permitiera que el dibujo y creatividad de Moebius se aprovechase. Por su parte Moebius, que dejaba su huella con el INCAL (1980) y el largo mañana (The Long Tomorrow, 1975), debía hacer honor a las historias entregadas por Stan y demostrar que podían hacer con sus trazos y colores algo único para los lectores.

Parábola

No siendo una larga saga, el objetivo no son las grandes batallas como en otros cómics de Marvel, sino entregar al lector un punto de vista de las principales virtudes y debilidades de la humanidad, mezclando la religión con la política y la supervivencia con la naturaleza primitiva del ser humano.

El cómic inicia con la visión de unos astrónomos en un observatorio buscando respuestas en las estrellas de algo que se desconoce, a lo que hacen contacto con una nave de dimensiones espectaculares que contiene a nada menos que a Galactus.

La humanidad al ver a este ser casi omnipotente descender de la nave no temen en identificarlo como una deidad, acelerando el caos de destrucción en el planeta. Con esto empiezan a aparecer los fanáticos religiosos, incluso uno de ellos autoproclamándose como un profeta, un charlatán que, sacando provecho de la situación, ha incitando a las personas a la locura, cometiéndose crímenes en contra de inocentes.

Silver Surfer, quien estaba oculto a vista de todos en el planeta tierra, decide actuar para salvar a la humanidad y abrir sus ojos del engaño del que son víctimas, apelando al amor y bondad que aún existe.

Implicancias en la actualidad

Con este cómic todos estamos llamados a ser libres, a actuar con bondad y con cordura respetando a los demás y no ha depender de alguien mas que nos guíe. A diferencia del cómic convencional que muestra al héroe del cual la humanidad depende y necesita, la última enseñanza que trasmite el surfista es esta:

La humanidad ruega que la guíen, pero lo mejor es dejarlos con su libertad

No se debe tomar estos cómics a la ligera porque la enseñanza no se queda en 1988 cuando fue escrito, se trasmite hacia las distintas épocas, dejando que la humanidad sea quien elija el camino y mostrando que, a veces, somos ciegos frente a lo que creemos más grande y olvidamos nuestra libertad.