My Hero Academia es un anime de acción y comedia de los más conocidos actualmente y que trajo nuevos aires al género shōnen y de superhéroes. Actualmente dispone de 4 temporadas, la mayoría compuesta por 25 capítulos, y una quinta temporada en camino próxima a estrenarse en marzo de este año. En este primer especial de dos partes, analizaremos qué tal son las primeras dos temporadas, lo bueno y lo malo.
En un mundo en el que la mayoría de las personas adquiere poderes y la profesión de héroe es un trabajo más, un joven llamado Izuku Midoriya sueña con tener superpoderes y asistir a la Academia U.A., a pesar de saber que estos nunca llegarán a considerarlo. Sin embargo, el héroe número uno y favorito de Izuku, All Might, podría tener la solución para él.
La temporada 1 no posee una historia demasiado original, el género de superhéroes, en todo ámbito, no se puede dar mucho ese lujo. A pesar de esto, la trama sí engancha muchísimo sin necesidad de que los capítulos estén repletos de acción. El progreso de los personajes para entrar a la Academia es entretenido de ver y también sus vivencias cuando ya están dentro, sus entrenamientos, etc. El ritmo de la historia no se estanca, todo fluye muy bien, además de que esta temporada tiene tan solo 13 episodios.
Los personajes que se introducen en esta primera temporada acompañan a Izuku a lo largo de las siguientes, y la verdad es que son personajes muy entrañables, tanto los que son o están cerca de ser protagonistas, como los que salen poquito tiempo en pantalla.
Todos se sienten bastante cercanos y es poco probable no encariñarse con la mayoría de ellos. Cada uno tiene su personalidad, su carisma y su encanto, que los distingue de los demás. Sus poderes (o quirks) también los hacen únicos, que van desde lo casi inútil hasta lo realmente poderoso. Es muy entretenido ir conociéndolos.
No es que Izuku sea un pésimo protagonista, pero sí deja que desear. Su actitud puede llegar hasta enojar y el trono de llorón se lo podría pelear con Shinji de Evangelion, además de poseer un don prácticamente regalado.
Aún así, su personalidad y simpatía hacen de Deku un protagonista no tan malo, pues a medida que lo vas conociendo ves a un chico con un sueño por alcanzar, y una solidaridad que repartir. Puede que no sea el peor de todos, pero no es el mejor ni de lejos.
Fácilmente las clases podrían llegar a ser lo más flojito del anime. En sí, casi todo lo relacionado a la Academia y es un problema que tienen todas las temporadas, pero se siente más pesado en esta. Si bien de eso se trata pues el mismo título lo dice, existen episodios que dejan altas expectativas para luego decaer en el entorno escolar. Sin embargo, las actividades escolares pueden ser diferentes, tales como los entrenamientos que los personajes tienen o el torneo de la temporada 2.
Simplemente épicas. Es cierto que hay unas que son más interesantes de ver que otras, pero todas y cada una se disfruta demasiado. Incluso verdades salen de estas. Veremos entrenamientos tipo juegos, batallas entre alumnos, alumnos contra profesores, y claro, veremos a los estudiantes contra los villanos. Más de una mantiene expectante, ansioso por saber cómo termina o quién gana. Épicas.
Diversos personajes son introducidos en esta segunda temporada, tanto del bando de los buenos como de los malos, y algunos más entrañables que otros. A destacar personajes como Endeavor, Gran Torino y Mei Hatsume por el lado de los héroes; Himiko Toga, Stain y Dabi por el lado de los villanos. A la mayoría de ellos los terminas amando y, aunque varios personajes nuevos terminan siendo apartados a un lado, cada uno de ellos tiene su momento.
Las últimas escenas del capítulo final pueden llegar a ser realmente absurdas si se piensan o analizan con detenimiento. Una amenaza por parte de la Liga de Villanos solo queda en palabrerías y nada de acción, una oportunidad desaprovechada. Y es que en comparación a la expectación que deja el final de la temporada uno, este final se queda bastante corto, sin generar una gran emoción por la temporada siguiente. Un final no malo malísimo, pero sí bien meh…
Ambas temporadas son sumamente disfrutables, ideales para pasar un buen rato. De las dos, diría que la primera temporada presenta más problemas, de los cuales me gustaría decir que se solucionan en las siguientes temporadas, pero no es así, aunque sí mejoran un poquito.
De estas dos, sin duda alguna mi temporada favorita es la segunda, por todo lo que la rodea: la acción, sus personajes, sus revelaciones. ¿Serán mejores la temporada 3 y 4? Lo veremos en la parte 2 y final, además de conocer mi puntaje final para el anime en general.
Batman: Yo soy Gotham es una obra magistral del cómic que sumerge al lector en…
"Beck" es un manga que cautiva a sus lectores con una narrativa fresca y vibrante…
"Sun-Ken Rock" no es solo un manga; es una experiencia, un viaje tumultuoso a través…
En las páginas del manga Lady Snowblood o más conocido en el mundo oriental como…
State of Decay es un juego que te sumerge en un mundo post-apocalíptico infestado de…
El auge de la tecnología móvil ha remodelado el panorama de la industria del juego,…
