Las Princesas Rebeldes: un libro para niñas aventureras

Para los niños y niñas que aman las aventuras y la magia, llega la colección Las Princesas Rebeldes para entretenerse y disfrutar.

Escrito por Cuarto Literario

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Siempre ha existido mucha oferta de libros infantiles, obras que los niños pueden disfrutar y a veces también pueden sacar alguna enseñanza. Pero los libros infantiles más antiguos se habían quedado, muchas veces, estancados en estereotipos de género, donde los cuentos «para niñas» eran tipo La Cenicienta o La Bella Durmiente, donde un príncipe las rescataba.

Con los avances de la sociedad esos libros quedaron anticuados (independiente de que tengan muchísimo valor) y a las niñas tenemos que mostrarles nuevos modelos a seguir. Es ahí donde Las Princesas Rebeldes entra a jugar. La primera entrega lleva por subtítulo El misterio de la virgulina inmortal, por lo que se vendrían nuevas entregas (en otros países ya salió uno nuevo).

De qué se trata Las Princesas Rebeldes

«Alma es la princesa heredera al trono. Detesta el protocolo y los actos oficiales. Pero, al cumplir once años, tendrá que enfrentarse a grandes retos: dar su primer discurso en público, asistir a grandes eventos representando a la casa real y… ¡aprender a volar y mover objetos con la mente! Alma descubrirá con asombro que posee en su interior superpoderes increíbles. Junto a otros jóvenes herederos, formará un grupo que muy pronto se convertirá en leyenda: Las Princesas Rebeldes».

Así describe Editorial Planeta este nuevo libro infantil. Durante el texto se va descubriendo el protocolo al cual debe someterse la joven princesa y cómo comienzan a ocurrirle cosas extrañas que ni ella entiende. Tiene también un trasfondo ambientalista que es muy adecuado para nuestros tiempos.

El formato del libro y su lectura

El libro está escrito en prosa e intercala páginas tipo cómic. Esto puede ser una gran ventaja para que los niños enganchen. Tiene también muchos dibujos a lo largo de sus páginas. Es un libro de más de 360 páginas, lo que puede sonar abrumador para un niño o una niña. Sin embargo, la letra es grande y el espaciado generoso. Tiene unas 150 palabras por página (un libro para adultos tiene entre 250 y 300 palabras). Esto hace que sea un libro pesado, es para sentarse a leerlo con apoyo, las manos sufren después de un rato.

El inicio es un poco lento, lo que también es un riesgo para los niños, que podrían querer dejarlo, pero cuando empiezan a pasarle cosas a Alma se pone entretenido y deja con ganas de seguir leyéndolo. De todos modos, en otras notas ya lo habíamos dicho, la lectura infantil lo ideal es que sea mediada, que haya un adulto que sepa lo que está leyendo su hija/sobrina/alumna y los acompañe en la lectura.

Sobre el autor de Las Princesas Rebeldes. El misterio de la virgulina inmortal

Roberto Santiago figura como el autor, aunque el libro especifica que se escribió en conjunto con Ángela Armero, aunque no sale ninguna información específica sobre ella. Roberto se presenta así en la solapa: «Escritor de día, superhéroe de noche. Cuando cumplió once años se puso un antifaz y una capa y salió a la calle para salvar a la humanidad. Desde entonces ya ha salvado dos gatitos, un helecho y un perro abandonado. En cuanto al resto de la humanidad, sigue en ello (…)», una presentación algo ambiciosa, pero que funciona en el contexto de este libro.

Pero para que sepas qué ha hecho Roberto en el mundo de la cultura, acá seremos más específicos. Es escritor, dramaturgo, guionista y director de cine. Ha escrito 50 novelas infantiles y juveniles con más de 3 millones de ventas en España y traducciones a varios idiomas. Ha ganado varios premios importantes entre el que destaca uno de los infantiles más conocidos: El Barco de Vapor.

En 2021 inicia un proyecto: el multiverso SUPERHÉROES. Cuatro colecciones independientes con un nexo común: los protagonistas son niños y niñas que empiezan a desarrollar superpoderes el día que cumplen once años. Da la idea, eso sí, de que algunas colecciones son «para niñas» (como esta de las princesas) y otras «para niños» (colección Los Once que acaba de salir también). Esas distinciones deberíamos ir erradicándolas.

Para concluir, el libro es divertido, probablemente llame la atención con sus dibujos y la idea de estas páginas con cómic (las ilustraciones son de Lourdes Navarro) puede ser interesante para los niños y las niñas, ya que entrega valores, pero de una manera que puede conectar con ellos y no a tipo de moraleja.