Domingo 07 de marzo de 1999: Los niños elegidos fueron presentados a la teleaudiencia japonesa por las pantallas de Fuji TV, desatando un fenómeno global llamado Digimon Adventure. Sin embargo, un día antes, el sábado 06 de marzo se estrenó en cines nipones el cortometraje del mismo nombre, que serviría como puntapié inicial y prólogo del anime.
El corto producido por Toei Animation, fue el debut como director de Mamoru Hosoda, quien en tan solo 20 minutos logró demostrar todo su potencial, el cual lo convertiría en uno de los directores de animación más importantes de la actualidad.
Tristemente, y como suele ocurrir por estos lugares, este corto no llegó de forma íntegra a Latinoamérica, sino más bien su contraparte americanizada por Fox Kids y Saban Entertainment.
Con el fin de replicar el éxito en el cine de franquicias como Pokémon, la cual si contaba con una película, a los ejecutivos de Fox Kids y Saban no se les ocurrió nada mejor que unir 3 obras audiovisuales de Digimon (independientes entre sí), y crear una verdadera aberración inentendible. Censuraron escenas, editaron diálogos para poder dar un sentido global, cambiaron la música, etc.
Estas obras fueron: el cortometraje que nos convoca, Digimon Adventure (1999), y los mediometrajes Digimon Adventure: Our War Game! (2000) y Digimon Adventure 02: Digimon Hurricane Landing!! Transcendent Evolution!! The Golden Digimentals (2000) los cuales dieron vida a la bazofia estadounidense llamada Digimon The Movie (2000).
Argumento
A mediados de los años 90, en el distrito de Hikarigaoka en Tokio, Japón, se genera una anomalía que une el mundo real con el mundo digital. Un digihuevo emerge desde la computadora de la familia Yagami, el cual es cuidado por Hikari y su hermano Taichi (Kari y Tai en Latinoamérica).
Del huevo digital nacería Botamon, un digimon (monstro digital) que posteriormente se convertiría en Agumon. Esta distorsión de la realidad también causaría que Parrotmon aparezca en pleno Tokio, originando una batalla campal entre las dos bestias.
Opinión y análisis
El cine de animación japonés nos tiene acostumbrado a su buena calidad, y esta no es una excepción. El cortometraje Digimon Adventure es una verdadera joyita audiovisual. Son 20 minutos de un despliegue de buen gusto y acción espectacular.
Hay maneras y maneras de comenzar una serie televisiva, y esta sin duda es de las mejores que he visto. Presentar un cortometraje en cines para incentivar a la gente a ver el anime funcionó perfectamente. El sábado 06 de marzo no fue más que el inicio de una franquicia audiovisual vigente hasta los días de hoy.
Pero ¿qué es lo que hace que este corto sea tan bueno? Fácil, su simpleza y pulcritud. Se nos presentó una idea sencilla, con un desarrollo sin complicaciones y un emotivo final. Todo esto adornado con una animación tradicional del más altísimo nivel.
No es menor recordar que este fue el debut de Mamoru Hosoda como director, y se puede notar su mágica mano en todo momento; la paleta de colores, el diseño de personajes, las escenas de acción simplemente perfectas. El ritmo general de la cinta es intrigante de principio a fin.
Me agrada mucho que en ningún momento aparecen adultos. Pareciese que todo lo que vemos no es más que una fantasía infantil propia de la imaginación de los hermanitos Yagami, y es ahí donde Mamoru se maneja a la perfección: en relatar un pequeño cuento lleno de sensaciones y emociones.
¿Dónde ver?
El cortometraje Digimon Adventure no se encuentra disponible en ninguna plataforma oficial de streaming (no en Latinoamérica por lo menos). Sin embargo, una búsqueda por Google los hará llegar rápidamente. Lo único que les pido, por favor, es que vean este corto en su versión japonesa y no el bodrio estadounidense.
Nos leemos luego.