The Last of Us: Parte II – El humano y la violencia

Naughty Dog toma muchos riesgos a la hora de continuar la historia de Joel y Ellie en The Last of Us Parte II. ¿Cómo resultó esta apuesta?

Escrito por J Martínez

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El caos mediático que The Last of Us: Parte II ha traído es digno de analizar científicamente. La secuela ha decidido no tomar el camino fácil en su narrativa, arriesgando en aspectos que los jugadores no están acostumbrados a ver. Es difícil hablar de él, sobre todo si se quiere hacerlo sin caer en spoilers, pero vamos a intentarlo, pues definitivamente es una obra que da para mucho que comentar.

NOTA: se hablará de los hechos ocurridos durante el primer juego. Sí, es un juego que salió hace 7 años ya, pero no está de más avisar 🙂

Desarrollado por Naughty Dog de forma exclusiva para PS4, el juego continúa la historia de Joel y Ellie. 5 años después de la primera parte, los personajes ya están completamente asentados en Jackson, viviendo tranquilamente en comunidad. Pero esta tranquilidad se verá interrumpida por un hecho que ocurre en las primeras horas de juego, dando pie a una historia de violencia pura, como muy pocas veces se ha visto en el medio.

Técnicamente abrumador

Digámoslo directamente. El juego se ve tan bien, que asusta. No sabemos qué brujería habrá hecho Naughty Dog para lograr este nivel de detalle en una PS4… ah no, sí sabemos… sobreexplotando a sus trabajadores…

Bromas de mal gusto aparte. La calidad gráfica es innegable. Ningún título es capaz de acercarse al nivel técnico (no solo visual) que la obra tiene. Cada lugar en el que estemos, cada objeto que veamos, cada rostro que observemos será impactante, provocando que la inmersión sea absoluta en todo momento. Claro, se ve ayudado de su estructura lineal, pero no por eso se debe dejar de aplaudir a los desarrolladores que hicieron esto posible.

Y es que no es solo que se ve estrepitosamente bien. Técnicamente también es superlativo. Las animaciones, el diseño de niveles, el trabajo de voces, la inclusión de múltiples opciones de accesibilidad. Todo está tan meticulosamente desarrollado que si esto se convierte en el estándar de los videojuegos entraremos en una nueva era de innmersión.

El uso del sonido también es muy especial. Los efectos de sonido siguen siendo crudos y violentos como en la primera entrega, aunque la música está un poco más ausente; ahora está muchísimo más orientada a la narrativa (sobre todo con la guitarra, que se muestra como vínculo entre Ellie y Joel).

Por esta ausencia, los momentos en que la música aparece, son potentes. Además, al haber muchísima más exploración, tarda mucho más en entrar, por lo que incluso la típica canción de tensión se aprecia mucho.

Narrativa que divide

Pero nadie ha criticado a la parte II por su innegable calidad técnica (aunque se debería hacer por las pésimas condiciones de trabajo que tenían los desarrolladores). Los mayores palos que ha recibido la obra han sido por su narrativa, y permítanme decir que… considero que están absolutamente equivocados.

Naugthy Dog se arriesgó con una narrativa que es difícil de ver en el medio. Tirando absolutamente todas sus fichas en esta, el juego se distancia del común de las secuelas, hecho que queda demostrado de inmediato en sus primeras horas.

Como sello de la compañía, hay un montón de técnicas cinematográficas que el juego usa. Ayudados de la tremenda calidad técnica, tenemos un montón de primeros planos para reflejar las emociones de los personajes. O silencios para construir una tensión más fuerte. Lo más llamativo, es el uso de la paleta de colores; comenzando con una muy similar a la de la primera entrega, que refuerza esa idea de las relaciones humanas, para terminar con una paleta muy fría, que refuerza la violenta historia que se nos presenta.

Y es que esa es la idea en la que se envuelve todo el juego; la violencia. A pesar de que el tema de la venganza está muy presente (cosa que se pudo ver en los trailers), el tema central se revuelve en lo anterior. Las mecánicas, visuales, personajes y trama tocarán esto, haciendo que nos cuestionemos nuestras –violentas– decisiones constantemente.

Poco más se puede decir sin caer en spoilers. Solo mencionar que hay que evitar dejarse llevar por algunos comentarios malintencionados de internet. No es una historia de inclusión forzada, ni tampoco es una historia mala sin sentido. La trama es capaz de mirarse de igual a igual con la del primer juego, y todos sabemos que esas son palabras mayores.

Los problemas de The Last of Us: Parte II

Bajo ningún motivo puede ser catalogado como la obra maestra que los críticos han dicho ya que este juego tiene problemas, y graves. El más notorio es que el ritmo es absolutamente terrible, mientras que otros tienen que ver con la poca capacidad de innovar que tiene (respecto a la primera entrega).

Respecto al ritmo… creo que con decir que se le podrían quitar 10 horas de juego, y aún así se seguiría sintiendo demasiado largo, se explica todo. Pero, elaboremos esto un poco más, aunque antes debemos aclarar que con loop de juego, nos referimos a las acciones que el jugador estará haciendo, en repetición, durante lo que el título dure.

El problema es que aquí es demasiado simple. Se puede definir así:

  1. Buscar recursos, donde posiblemente haya que resolver un puzzle simplón.
  2. Derrotar enemigos, ya sea infectados o humanos.
  3. Una cinemática que mueve la historia.

Comprenderán que hacer esto durante 25-30 horas se vuelve tedioso, y aunque la primera entrega tenía el mismo loop de juego, ahí no me pareció problemático, ya que el desarrollo de la relación entre Ellie y Joel daba lugar a conversaciones maravillosas, que atenuaban lo aburrido que resulta buscar recursos. Aquí esto no existe, ya que la mayor parte del tiempo nuestra protagonista estará sola, y cuando no lo esté, o no existirán estas conversaciones, o el personaje secundario de turno no es lo suficientemente destacable para hacerlas interesantes.

El segundo mayor problema del juego está en su poca capacidad de innovar. El avance técnico del juego es muy notorio, pero no se usa casi nunca a todo su esplendor. Lo peor es que, durante las primeras horas nos ilusiona con escenarios abiertos, mapas que explorar, puzzles con impresionantes físicas de cuerdas… para luego quedarse en la misma linealidad del primer título.

No me malinterpreten, hay un avance, pero este solo se enfoca en expandir las mecánicas ya vistas. Ahora los escenarios son más verticales; podremos atacar desde altura. O los combates son más dinámicos; con enemigos que te flanquean o son más agresivos dependiendo de sus facciones. Aspectos que se aprecian, pero que no alcanzan para refrescar mecánicas casi sobreexplotadas, mucho menos si estaremos durante tanto tiempo ejecutándolas.

Conclusiones

Lamentablemente no puedo recomendar a ciegas este juego. Si eres ultra-fan de original, adelante, es una compra segura. Continúa de gran manera ese final agridulce de la primera entrega y da una historia satisfactoria, mientras expande, hasta cierto punto, sus mecánicas.

Si estás buscando una buena historia… anda a ver una película, porque jugar por 25-30 horas solo por la trama, por más buena que sea, no lo vale

Lamenteblemente, a nivel personal, creo que un buen juego debería lograr un equilibrio entre mecánicas entretenidas y una narrativa interesante. The Last of Us: Parte II no lo consigue. Su gran trama, buen desarrollo de personajes y magistral calidad técnica no alcanzan para disimular unas mecánicas terriblemente tediosas y un ritmo cansino.

Y aunque se nota que hubo intención de refrescar la franquicia, con escenarios un poco más abiertos y verticales, más variedad en los combates, además de una narrativa muy arriesgada, la verdad es que la parte dos se siente más como un DLC –extremadamente largo- del primer título. Porque esa frescura se pierde a las pocas horas de juego, para terminar cayendo en la misma estructura, pero peor ejecutada, durante más tiempo.