Decir que las obras de Studio Ghibli y el trabajo de Hayao Miyazaki son maravillosas no es sorpresa para nadie, pues la gran mayoría de sus películas ya son clásicos de la animación japonesa.
Miyazaki es un director que tiene una imaginación muy amplia, en donde puede unir fantasía y el folclore japonés en el mundo real, esto lo ha hecho en muchas películas como Mi Vecino Totoro o El Viaje de Chihiro, pero hay algunas nos llevan a locaciones fuera del país del sol naciente.
Porco Rosso es una película dirigida por Miyazaki y estrenada en Japón el año 1992. El nombre de la película es una traducción italiana que en español seria “Puerco Rojo” o, mejor dicho, “Cerdo Rojo”.
La historia trata sobre un humano mitad cerdo apodado Porco Rosso, es un cazarrecompensas que siempre frustra los movimientos de una banda llamada Los Mamma Aiuto, mejor conocidos como “piratas del cielo” que rondan en el mar Adriático. Porco pilotea un hidroavión de color carmín (rojo) el que utiliza para ir en contra de los piratas y, por esas acciones, recibió el nombre de “Porco Rosso”.
Pese a ser un cerdo, nuestro protagonista fue una vez un humano llamado Marco Pavot, piloto de la fuerza aérea en la Primera Guerra Mundial. Por razones desconocidas y a través de una maldición se convierte en un hombre con la apariencia de un cerdo.
Al adentrarnos más en la trama, resulta que nuestro amigo porcino es bastante famoso por sabotear a los Mamma Aiuto, pero estos están cansados de que Porco les eche a perder sus fechorías, así que deciden vengarse de él contratando a un piloto americano de alta categoría llamado Donald Curtis para que lo pueda vencer.
También se nos presentan otros personajes como Gina, una cantante y propietaria del Hotel Adriano, quien ha quedado viuda tres veces dado que sus tres esposos eran pilotos y murieron en batalla. Y, por supuesto, tenemos a Fio Piccolo, una chica de 17 quien es experta en mecánica y en diseñar hidroaviones.
Algo destacable de mencionar es la ambientación, pues Porco Rosso nos lleva a la Italia fascista gobernada por Benito Mussolini. En algunas escenas hay militares rondando por las calles mientras que la policía secreta fascista busca capturar a Porco por sus movimientos contra los piratas, algo que el gobierno y la fuerza aérea italiana considera ilegal.
La trama es muy entretenida, hay momentos de comedia que me sacaron risas y alguna que otra sonrisa. Aunque el final de la película es algo diferente a lo que nos acostumbra Ghibli, no me pareció malo, solo es diferente.
La animación es excelente, este aspecto no es sorpresa para nadie que conoce a su director y trabajos pasados. Pues Porco Rosso no decepciona en entregar una animación digna del estudio, sobre todo en las escenas de aviones en los cielos, las cuales se ven increíbles.
La banda sonora igual hace un gran trabajo, pues Joe Hisaishi realizó composiciones preciosas, como siempre lo ha hecho en gran parte de las películas del estudio japonés. Pero quiero hacer una mención especial al tema “Les Temps des Cérises” cantado por Tokiko Kato, quien interpreta a Gina en la película. Sin duda esta canción le dio un toque de encanto en la escena donde se interpretó el tema.
http://www.youtube.com/watch?v=iltrkH_A-k4
En conclusión, Porco Rosso es una película que tienes que ver si quieres llamarte fan de Studio Ghibli. Su historia es muy entretenida, hay momentos en donde te vas a reír y puedo garantizar que, al terminar la película, estarás con una sonrisa en tu cara.
Puedes encontrar esta obra en DVD o Blu-ray, pero si quieres verla de forma inmediata, se encuentra disponible en Netflix con otras películas del mismo estudio que de poco a poco llegaran a la plataforma de streaming.