La ciudad de Gotham y sus villanos han llegado a ser mucho más interesantes que el propio Caballero Oscuro, pues grandes criminales como el Joker, Dos Caras y El Acertijo han sido personajes que han dejado huella en la peligrosa y decadente ciudad.
Una las cosas más importantes de una historia es que sea fresca, que llame la atención y que sea divertida de leer. Pero hay casos lamentables en donde hay ideas que pudieron escribirse mejor, desperdicio de personajes y tramas que son incapaces de ser interesantes, llegando incluso a ser aburridas.
Esto es lo que representa Harley Quinn: Preludios y chistes malos, escrito por Karl Kelsel y dibujado por Terry Dodson. Este tomo une las siete primeras grapas de Harley Quinn que se publicaron el año 2000 (Harley Quinn 2000 #1-7).
La historia empieza con Harley Quinn disfrazada de Hiedra Venenosa con el fin de engañar a los guardias y liberar al Joker del asilo de Arkham. Con el payaso del crimen fuera del asilo, junto a su arlequín, vuelven a ocultarse de la policía y del murciélago para continuar con sus fechorías.
El Joker, una vez libre, descubre que en Gotham hay un parque de diversiones con una nueva atracción, una montaña rusa donde «El Bromista» (una clara referencia al Joker) es la más famosa del lugar. Esto al payaso del crimen no le hace ninguna gracia, porque considera que están lucrando con su nombre. Harley, por su lado, empieza a hacer sus movimientos junto a sus secuaces en el parque para sabotear la montaña y convertirla en una trampa mortal.
Sin embargo, cuando la arlequín estaba preparando todo aparece Hiedra Venenosa, quien le habla sobre el altercado que hizo en Arkham para rescatar al Joker y le dice que no merece la pena estar con él, que solo la utiliza y que nunca hubo amor. Harley no cree lo que dice hasta que se descubre la triste realidad, el Joker nunca tuvo afecto hacia ella y casi la mata, pero con algo de suerte vence al payaso y lo vuelven a encerrar.
De ahí en adelante es donde Harley Quinn comienza su carrera criminal sin el Joker. La historia no suena tan terrible, hemos visto este argumento en varias historias, en la serie animada de Batman de los años 90 e incluso la podemos ver en la película Aves de Presa.
El problema es la ejecución de algunas partes. Entiendo que quieran agregar algo de comedia, pero creo que el escritor y el dibujante no lograron conectar este aspecto. Hay veces en donde las ilustraciones son realistas y otras son más caricaturescas, como si no estuvieran de acuerdo en cómo contar gráficamente la historia.
Sumado a lo anterior, aparecen varios villanos de Batman, entre ellos Dos Caras y El Pingüino, que no aportan absolutamente nada a la trama, es más, su participación se ve totalmente reducida a un par de páginas y más impactante aún es que el Pingüino sale sólo en tres viñetas, si esto no es desperdiciar personajes no sé lo que es.
El único personaje que no fue tratado de forma horrible y que además hizo que la historia fuera mas entretenida es El Acertijo, tras un encuentro inesperado con Harley Quinn en un robo a la mansión del mismísimo Bruce Wayne. Lo triste es que esto ocurre en los últimos capítulos del tomo, y decir que es lo más rescatable sea eso, es muy lamentable.
Lo que más me decepcionó fue cómo se ilustró al Joker, que si bien, tiene su personalidad y su típico carisma, el rostro me pareció poco inspirado y hubo momentos en donde me dije: este tipo no puede ser el Joker, parece una persona haciendo un cosplay sin gracia ni esfuerzo. Esto es doloroso, porque el payaso del crimen es el villano estrella de los cómics de Batman y uno de los personajes más interesantes del universo DC.
Y no esperen que llegue Batman a salvar esta obra mediocre, porque no aparece, sólo está su alter ego Bruce Wayne que al igual que los otros personajes que aparecen en el cómic no aporta nada a la trama.
Preludios y Chistes Malos es una obra olvidable, tenía buenas ideas pero están muy mal ejecutadas, con personajes desperdiciados y con poca participación. Dan más ganas de pegarle al Joker que sentir terror o miedo y Harley Quinn que, a pesar de todo su carisma e ironía, no logró convencer con esta historia aburrida y con falta de fuerza.